
Joven baleado tiene muerte cerebral: detuvieron al hijo de un sindicalista y buscan a un cómplice
Policiales22/10/2025
REDACCIÓN
Caleta Olivia tuvo un martes violento como consecuencia del ataque a Nahuel Franco Marcial, el joven de 18 años que fue baleado el domingo y permanece con muerte cerebral en el Hospital Zonal “Padre Pedro Tardivo”. El hecho, ocurrido en el barrio 17 de Octubre, derivó en enfrentamientos, detenciones y una investigación judicial que mantiene en vilo a la comunidad.


El presunto autor del disparo, identificado como T.P., se entregó este martes por la tarde. Según confirmaron fuentes policiales, el joven tendría una edad similar a la víctima y sería hijo del dirigente sindical Omar Pratt, del gremio de Petroleros Privados. La Policía busca a un segundo sospechoso que habría participado del ataque y continúa prófugo.
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El propio Pratt realizó un descargo en redes sociales, donde calificó la situación como “lamentable” y pidió que “Dios haga un milagro en la vida de Nahuel”. Además, negó que su hijo haya estado involucrado y sostuvo que “los que se le pusieron al lado del auto y gatillaron dos veces fueron ellos”. También denunció que su vivienda fue atacada a balazos.
Durante la madrugada del martes, la sede del Sindicato Petrolero, Gas Privado y Energías Renovables Santa Cruz también fue blanco de disparos. El edificio, ubicado en la esquina de Lavalle y Güemes, registró daños que podrían estar vinculados al caso Marcial. La Policía de Santa Cruz realizó peritajes en el lugar y continúa analizando las conexiones entre ambos episodios.
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El ataque a Nahuel ocurrió el domingo alrededor de las 21:30, cuando una llamada al 911 alertó sobre detonaciones en Quijote Novelia y Prefectura Naval. Al llegar al sitio, los agentes hallaron al joven tendido con una herida de bala en la cabeza. Fue trasladado de urgencia al hospital local, donde permanece internado en terapia intensiva.
El hecho provocó una fuerte reacción social. Amigos y familiares de Nahuel se movilizaron el martes por la noche y se enfrentaron con la Policía frente a la Comisaría Segunda, donde creían que estaba detenido el sospechoso. En medio de los disturbios, se arrojaron piedras, hubo disparos y se desplegó un amplio operativo de seguridad en el barrio Unión.
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Horas antes, vecinos, compañeros de escuela y organizaciones barriales habían marchado desde el Monumento al Obrero Petrolero, El Gorosito, hasta el hospital y distintas dependencias policiales. Con velas y carteles, pidieron justicia y el fin de la violencia urbana que azota la ciudad.
Fuente: La Opinión Austral

















