

Otro sacudón en Atlético Tucumán. Lucas Pusineri dejó de ser el técnico del Decano tras una semana convulsionada, marcada por contradicciones y reuniones interminables en la sede de 25 de Mayo y Chile. La dirigencia decidió ponerle fin a su contrato en medio de un clima enrarecido, con el objetivo de bajar la tensión interna que domina al club.


El entrenador, que había sido despedido el miércoles 22 y luego ratificado en el cargo al día siguiente, terminó acordando su salida este domingo. Las diferencias con la Secretaría Técnica y los referentes del plantel hicieron imposible su continuidad. Pusineri se va dolido, convencido de que aún estaba dentro de los objetivos previstos para el semestre.
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Su segundo ciclo al frente del equipo deja un saldo de 28 partidos dirigidos, con 10 victorias, 4 empates y 14 derrotas. El rendimiento irregular en el Torneo Clausura 2025, sumado a la falta de respuestas futbolísticas, terminó por desgastar la relación con la dirigencia. El DT no logró revertir la caída anímica ni el malestar generalizado dentro del vestuario.
La conducción técnica quedará en manos de Hugo Colace, quien venía desempeñándose como entrenador de la Reserva. El exmediocampista de Newell’s y Fulham había llegado a Tucumán a fines de 2024 y tendrá ahora la oportunidad de dirigir en Primera. Su designación será interina, al menos hasta la finalización del Clausura.
Colace registra 31 partidos al mando de la Reserva, con 11 triunfos, 10 empates y 10 derrotas. Su debut oficial podría darse el sábado 1° de noviembre ante Independiente, por la fecha 14 de la Zona B. La dirigencia confía en que su perfil tranquilo pueda aportar algo de estabilidad en medio de tanta confusión.
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El panorama institucional, sin embargo, sigue siendo preocupante. Días atrás, el plantel emitió un duro comunicado denunciando desprolijidades dirigenciales y malos manejos internos. “Queremos dejar en claro que esto no es un reclamo económico, sino por cuestiones estructurales del club”, expresaron los futbolistas, en una carta que generó un fuerte impacto.
El descontento también se trasladó a las tribunas. Durante la derrota ante San Lorenzo, los hinchas insultaron al plantel y arrojaron billetes en señal de protesta, lo que desató la furia de Leandro “Loco” Díaz, quien terminó discutiendo con un espectador. La tensión entre jugadores y público llegó a un punto límite.
Así, en apenas cuatro días, Pusineri fue despedido dos veces, confirmando la desorganización que atraviesa al Decano. La salida del técnico refleja el caos institucional que el club deberá resolver si quiere volver a encontrar rumbo. En Tucumán esperan que Colace pueda apagar el incendio y comenzar a reconstruir desde el vestuario hacia afuera.

















