El Cilindro de Avellaneda vivió una noche inolvidable.
El Cilindro de Avellaneda fue anoche una verdadera fiesta. Miles de hinchas de Racing colmaron las calles cercanas al estadio para despedir al equipo antes del duelo decisivo ante Flamengo. La ciudad se tiñó de celeste y blanco en una jornada donde el fervor racinguista se sintió en cada rincón.
La Academia intentará revertir el 1-0 sufrido en el Maracaná y alcanzar la gran final de la Copa Libertadores en Lima. El partido del próximo miércoles promete ser una de esas noches que quedan grabadas para siempre en la historia del club. Con la fe intacta, los hinchas se unieron para demostrar que el aliento también puede ser una forma de empujar la pelota.
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El banderazo comenzó a caer la tarde y se extendió hasta la noche. Familias, grupos de amigos y peñas de todo el país llegaron con banderas, bombos y bengalas. El cielo de Avellaneda se iluminó con luces y cánticos que no dieron respiro.
El impulso de la convocatoria lo dio el propio Gustavo Costas, quien en un video publicado por el club pidió acompañamiento. “Quiero invitarlos a despedir al plantel antes de la concentración en Pilar”, dijo el DT con la emoción visible. Su mensaje fue suficiente para que los hinchas organizaran una movilización masiva en cuestión de horas.
Las palabras del técnico encontraron eco inmediato. “Sabemos que todos juntos podemos lograr este sueño”, agregó Costas, y la frase se volvió un grito compartido en las tribunas. La despedida se transformó en un símbolo de unión entre el plantel y el pueblo racinguista.
Mientras el micro partía rumbo a la concentración, los jugadores saludaban desde las ventanillas con gestos de emoción. El vehículo avanzó a paso lento entre una multitud que agitaba banderas y entonaba canciones históricas. Las bengalas encendieron el cielo, y el humo celeste marcó el camino de la ilusión.
En Pilar, el equipo inició las últimas horas de trabajo antes del partido. Costas analizó posibles variantes en la formación inicial, especialmente tras la lesión del capitán Santiago Sosa. El mediocampista fue operado con éxito de una fractura facial y no podrá estar presente en el encuentro decisivo.
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La ausencia de Sosa obliga a repensar el esquema. El técnico baraja dos alternativas: reforzar el mediocampo o sumar una línea defensiva de cinco hombres. Todo indica que esperará hasta último momento para definir los titulares.
Entre los nombres que suenan, figuran Facundo Cambeses en el arco, Marcos Rojo en defensa y Tomás Conechny en la delantera. La alineación final dependerá del ritmo de los entrenamientos y de cómo llegue cada jugador. Racing confía en su mística y en el empuje de su gente para revertir la serie.
El Cilindro ya late con fuerza. Racing se prepara para otra noche épica, de esas que el fútbol argentino no olvida. El banderazo fue apenas el comienzo de una historia que busca un nuevo capítulo en la gloria continental.
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