Reactivan La Barrancosa: vuelve la megaobra energética que transformará Santa Cruz
Actualidad28/10/2025
Sergio Bustos
Represa Cepernic.
Después de una larga pausa, la represa hidroeléctrica La Barrancosa vuelve a tomar impulso en Santa Cruz. La obra, también conocida como Gobernador Jorge Cepernic, comenzará una nueva etapa gracias a un acuerdo entre la empresa estatal Enarsa y bancos chinos, que garantizaron la reactivación del financiamiento y la provisión de insumos.
El anuncio fue realizado por el ministro de Energía y Minería de la provincia, Jaime Álvarez, quien confirmó que 2.600 trabajadores serán reincorporados y que los campamentos ya comenzaron a reacondicionarse para retomar las tareas. “Santa Cruz debe prepararse para una nueva etapa de energía hidroeléctrica, eólica y solar. Esta obra es el punto de partida”, sostuvo.
La represa La Barrancosa forma parte del complejo hidroeléctrico más ambicioso del país, junto a Condor Cliff (ex Néstor Kirchner). Ambas estructuras se levantan sobre el río Santa Cruz, en un proyecto que demandará una inversión superior a 4.500 millones de dólares y que busca fortalecer la generación energética del sur argentino.
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Aunque Condor Cliff todavía no retomará sus trabajos, el reinicio de La Barrancosa marca un punto de inflexión en la política energética nacional. Según fuentes oficiales, la obra se reanudará bajo una planificación técnica revisada, con un ingreso gradual de personal y una nueva adenda contractual que actualizará los términos financieros.
El financiamiento cuenta con el respaldo del grupo chino Gezhouba, responsable de las obras civiles y del reacondicionamiento de las estructuras existentes. Ya comenzaron las compras de insumos y la verificación de equipos que quedaron inactivos desde 2022.
La provincia informó que los telegramas de reincorporación se enviaron bajo la Ley Provincial 90/10, que exige que el 90% del personal contratado tenga residencia comprobada en Santa Cruz. Para garantizarlo, se realizarán cruces de datos con municipios y organismos provinciales.
El megaproyecto se gestó hace más de medio siglo, con estudios sobre el potencial hidroeléctrico del río Santa Cruz realizados en los años 50. Décadas después, Néstor Kirchner impulsó su ejecución como una apuesta estratégica para diversificar la matriz energética. Sin embargo, desde su adjudicación en 2013, la obra atravesó conflictos técnicos, demoras en los desembolsos y sucesivos cambios de gestión.
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Hasta el momento, el avance de La Barrancosa no supera el 25%, pero la nueva etapa busca completar la construcción en un plazo de tres años, con prioridad en obras de ingeniería, montaje electromecánico y conexión al sistema interconectado nacional.
La reactivación no solo implica movimiento económico y empleo directo, sino también la posibilidad de transformar a Santa Cruz en un eje energético del sur argentino, combinando represas, parques eólicos y proyectos solares.
Para los habitantes de la región, el regreso de los trabajos representa la esperanza de reactivar la economía local y recuperar miles de puestos perdidos durante la paralización. El objetivo oficial es sostener el ritmo de obra con desembolsos garantizados y seguimiento técnico permanente.
Si la planificación se cumple, La Barrancosa podría generar más de 600 megavatios de potencia y convertirse en una de las principales fuentes de energía limpia del país. “Después de tanta espera, Santa Cruz vuelve a moverse al ritmo del río”, resumió un operario reincorporado, reflejando el entusiasmo que se siente en los campamentos.
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