Jesica Cirio sacudió la noche porteña con un romance que ya nadie oculta

Jesica Cirio volvió a ocupar el centro de la escena con un romance que tomó vuelo en silencio. La modelo retomó su vida social y apareció junto al empresario Nicolás Trombino, con quien se la vio en distintos encuentros de Buenos Aires.

La relación tomó aire cuando Infama reveló los primeros detalles y Laura Ubfal describió al empresario con información precisa sobre su vida y su vínculo con la modelo. Ese dato marcó el inicio de una ola de comentarios que siguió creciendo.

“Él tiene 35 años, vive en Puerto Madero y tiene un hijo adolescente. Le dicen ‘Niki’”, contó Ubfal en el programa de América, mientras la noticia avanzaba entre panelistas y redes a un ritmo veloz.

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La panelista remarcó que la pareja se conoció gracias a amigos en común, y que el vínculo tomó temperatura con el correr de los meses. Esa cercanía se hizo más visible cuando los vieron juntos en salidas y reuniones.

“Él es rubio de ojos claros, muy fachero. Ella está muy enamorada”, agregó Ubfal mientras otros periodistas sumaban sus propias observaciones. Entre ellas, Karina Iavícoli sostuvo que los testigos los describieron “muy románticos” en su última aparición pública.

El viaje que habrían hecho a Punta del Este tres semanas atrás reforzó aún más la historia. Cirio y Trombino se mostraron distendidos y cómodos, según versiones que surgieron desde Uruguay y alcanzaron la prensa argentina en pocas horas.

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En Buenos Aires, la pareja ya habría compartido eventos donde no intentó ocultarse. “A los besos”, aseguró Ubfal al relatar cómo los vieron en una reunión en la Ciudad, lo que confirmó que la relación se encuentra en un punto alto. Ese crecimiento también impactó en la vida cotidiana de Cirio. “Él es quien la asesora de cómo comportarse con los medios. Ella confía mucho en él”, sostuvo Ubfal al describir el rol que Trombino tomó en los últimos días.

La historia se cruza con un capítulo reciente de la modelo. Tras su separación de Elías Piccirillo, Cirio apostó a una vida más tranquila, centrada en su hija, su círculo íntimo y un ritmo lejos de las cámaras. Ese camino la llevó a evitar apariciones públicas durante varios meses.

En agosto, una cámara de Intrusos la encontró en la calle y ella explicó su situación actual. “Hoy prefiero estar trabajando de manera privada. Estoy bien así”, dijo cuando la consultaron por su futuro en los medios y su vida profesional.

Esa etapa parece convivir ahora con otro clima. Cirio transita un momento distinto, más liviano, aunque sin perder el perfil bajo que impuso tras su último escándalo mediático. Entre apariciones discretas y nuevas señales, su romance con Trombino empezó a tomar forma de confirmación.