Entre calma y polémica: Di María habla, el gesto de Estudiantes divide al país

El clima previo al partido entre Rosario Central y Estudiantes de La Plata fue de alta tensión. El “Fideo” Di María bajó el tono con declaraciones mesuradas. Sin embargo, el gesto del conjunto platense generó debates en todo el país.

Antes del inicio del partido, Estudiantes realizó un pasillo de espaldas a Central. La medida llamó la atención de todos los presentes y fue comentada por los protagonistas. La dirigencia del Pincha dejó claro que su intención era mostrar disconformidad sin romper el protocolo.

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Di María, figura del equipo rosarino, relativizó el gesto y destacó que “eso es cosa de ellos… el pasillo lo hicieron igual”. El campeón del mundo en Qatar 2022 quiso mantener la calma ante los micrófonos. Sus palabras suavizaron la tensión, aunque no borraron la polémica.

El jugador agregó que su equipo entró al campo como correspondía. “La verdad que queda ahí”, completó el “Fideo”. Sus declaraciones reflejan un enfoque más deportivo que administrativo frente a la situación.

Desde La Plata, el malestar del Pincha se vincula a cómo se resolvió el torneo. Consideran que la consagración de Central no se dio por el juego en sí. La sensación de injusticia se tradujo en gestos simbólicos dentro del protocolo.

El pasillo de espaldas funcionó como una forma de comunicar un desacuerdo sin romper la formalidad. Es un mensaje claro de que no reconocen la coronación del rival. La actitud del club y los jugadores mostró que la polémica no termina con la última fecha.

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En el Gigante de Arroyito, la tensión se sintió dentro y fuera del campo. Central se concentró en lo futbolístico mientras que Estudiantes dejó explícita su postura. El encuentro se convirtió en un escenario donde el conflicto administrativo y deportivo se cruzaron.

Más allá del resultado, el ambiente previo y las miradas cruzadas marcaron el partido. Cada gesto de los protagonistas fue interpretado como un mensaje cargado de significados. La prensa y los hinchas analizaron cada detalle del protocolo y del comportamiento de los equipos.

El episodio promete seguir generando repercusiones en el fútbol argentino. Las declaraciones de Di María, aunque calmadas, no eliminaron la polémica. Estudiantes reafirma su postura y la tensión podría aparecer en futuros enfrentamientos.

El pasillo de espaldas se transformó en símbolo de una disputa que va más allá del resultado deportivo. Rosario Central festejó su título, pero el Pincha marcó su desacuerdo de manera contundente. Los próximos partidos podrían reflejar si esta controversia tendrá nuevos capítulos.