Shell se bajó de Argentina LNG 2 y YPF reacomoda socios para sostener 18 MTPA

Shell confirmó que se retira del esquema previsto para el proyecto Argentina LNG en su tramo vinculado a la etapa 2 y obligó a YPF a reordenar la estructura societaria para completar la capacidad total. En un comunicado, la compañía informó que “ya no participa en el proyecto base, pero seguirá evaluando futuras opciones de expansión”.

Según información atribuida a Reuters, Shell justificó la decisión por “dinámicas del proyecto que ya no justificaban la participación continuada, incluyendo un cambio significativo en el alcance”. Con esa salida, YPF queda con la misión de cubrir el espacio que dejaba el socio para la ampliación.

La novedad se conoció luego de señales públicas sobre el estado de las conversaciones. El CEO de YPF, Horacio Marín, ya había marcado que el acuerdo con Shell venía lento y lanzó una frase que ahora toma otro peso: “Si no es con Shell, será con otra. Vamos a dejar la vida por llegar a 18 MTPA”.

OTRAS NOTICIAS

El FMI insiste en una acumulación más dura de reservas y advierte que el objetivo luce distante

La etapa 2 acompañaba al módulo base de 12 MTPA impulsado por ENI y Adnoc. Con Shell afuera, el proyecto necesita completar volúmenes y participación para sostener la ambición total. En el sector no descartan dos caminos: encontrar un nuevo socio global o sumar más participación de Adnoc para cubrir capacidad.

En ese rearmado ya aparecen nombres fuertes. Entre los potenciales reemplazos mencionados en el circuito energético figura Saudi Aramco, una opción que, si avanza, reconfigura el mapa del emprendimiento y le suma peso geopolítico y financiero.

Por ahora, la salida no altera el avance del módulo base. ENI y Adnoc siguen con la ingeniería, mientras YPF sostiene que tiene alternativas para no correr la hoja de ruta. La consigna puertas adentro se repite: hay opciones en carpeta y la intención es cerrar un acuerdo antes de la decisión final de inversión.

Argentina LNG es la apuesta mayor para transformar el gas de Vaca Muerta en exportaciones de GNL a gran escala. El plan apunta a unidades de licuefacción flotantes frente a la costa de Río Negro y a un polo exportador que, con precios firmes y demanda sostenida, puede sumar ingresos anuales por miles de millones de dólares cuando quede operativo.

Shell se baja de un tramo relevante y el tablero cambia, pero el proyecto sigue en marcha. Ahora, la presión recae sobre YPF: sellar un reemplazo, recalcular participaciones y sostener el objetivo de 18 millones de toneladas por año sin convertir la reconfiguración societaria en una demora.