El FMI insiste en una acumulación más dura de reservas y advierte que el objetivo luce distante

El Fondo Monetario Internacional reforzó su mensaje público hacia Argentina y expresó que alcanzar la meta de reservas “será un desafío”, una frase que retumbó con fuerza en Washington y que reabrió la discusión sobre la capacidad del país para cumplir los compromisos firmados. La vocera Julie Kozack detalló que “las políticas monetarias y de divisas deberán apoyar una vía de acumulación de reservas más ambiciosa”, una postura que evidencia la presión del organismo para que el Gobierno sostenga un rumbo más rígido en materia de liquidez externa.

Durante la conferencia de prensa, Kozack inició su exposición con una mirada favorable sobre la marcha económica local. “Se siguen logrando avances sustanciales en el fortalecimiento de la estabilidad macroeconómica en Argentina”, afirmó, y agregó que “el crecimiento se está reanudando, con una estimación del 4,5% este año”. La portavoz buscó remarcar señales positivas, aunque de inmediato subrayó que la estabilidad todavía necesita un respaldo más sólido.

OTRAS NOTICIAS:

CAPIP cruzó a Nación por el “doble pesaje” en puertos y avisó: no paga un peso más

La advertencia sobre las reservas ocupó el centro de la escena. Kozack sostuvo que “en esta fase, alcanzar el objetivo de reserva de fin de año será un desafío”, una definición que apunta al esfuerzo que las autoridades deberán sostener en las próximas semanas. La funcionaria explicó que un colchón más amplio de divisas “ayudará a Argentina a afrontar mejor los shocks y a facilitar un reacceso a los mercados internacionales de capitales”, mensaje que retoma la preocupación histórica del organismo por la posición externa del país.

La situación actual del Banco Central expone la magnitud del problema. Para diciembre, las reservas netas debían ubicarse en USD -2.600 millones, pero la activación del tramo del swap con Estados Unidos por USD 2.500 millones llevó la estimación a cerca de USD -16.000 millones, un dato que enciende nuevas alertas en el plano financiero. Kozack remarcó que “sigue siendo esencial que las autoridades hagan un esfuerzo concertado para reconstruir las reservas internacionales”, una frase que sintetiza la presión técnica del Fondo en esta etapa.

OTRAS NOTICIAS:

Ordenan a una empresa turística corregir anuncios que mostraban a Malvinas como territorio británico

La funcionaria también respondió preguntas sobre el programa vigente y evitó adelantar posiciones. Consultada por un eventual perdón del organismo ante el incumplimiento de la meta de reservas, señaló: “No voy a especular en esta fase sobre eso que se considerará en las discusiones para la próxima revisión”. La respuesta dejó abierta una negociación que deberá madurar con el paso de las semanas y con los datos finales sobre la mesa.

El Fondo insistió en la necesidad de avanzar en otros frentes. Kozack mencionó “reformas destinadas a mejorar la eficiencia y la equidad del sistema fiscal argentino” y destacó la importancia de revisar subsidios, gastos y normas regulatorias. Indicó además que “será fundamental construir consenso a favor de estas reformas, incluyendo la aprobación de cualquier legislación que pueda ser necesaria”, un mensaje que apunta de forma directa al escenario político local y a las tensiones entre gobierno y oposición.

OTRAS NOTICIAS:

Argentina acelera su giro nuclear y apunta a un rol central en la energía del futuro

La vocera explicó que la próxima misión del organismo llegará recién el año próximo. Indicó que los técnicos “evaluarán los objetivos a finales de diciembre” y que el viaje ocurrirá luego de esa fecha, en línea con la metodología habitual del Fondo. También respondió sobre el tratamiento del swap estadounidense dentro de las reservas: “Tenemos un marco para analizar instrumentos de este tipo y lo aplicaremos cuando publiquemos el próximo informe técnico”, afirmó ante una consulta puntual.