Pánico en el aire: Durante un salto grupal un paracaidista quedo enganchado de la cola de un avión
Actualidad11/12/2025
REDACCIÓN
Accidente paracaídas
La mañana parecía rutinaria en Tully hasta que un paracaidista quedó atrapado bajo la cola del Cessna Caravan, minutos después de que el grupo iniciara su tercera salida del día.
El video resurgió en redes y reactivó el debate sobre seguridad aérea.
El salto se desordenó cuando el paracaídas de reserva se enganchó en un alerón y se abrió sin aviso, lo que arrastró al deportista hacia la parte trasera del avión.
Sus compañeros vieron el impacto contra el estabilizador izquierdo.
El golpe dañó la aeronave y provocó heridas en sus piernas.
La ATSB informó que el operador de la cámara cayó hacia el vacío mientras observaba al accidentado colgarse bajo la estructura.
La tensión creció a bordo mientras el avión perdía velocidad.
El piloto sintió vibraciones inusuales y recibió aviso sobre el paracaidista en peligro, un dato que modificó su enfoque de maniobra.
El saltador usó un cuchillo especial y cortó once sogas en menos de un minuto, un gesto que le salvó la vida.
La herramienta no era obligatoria, pero resultó decisiva.
Una vez libre, cayó en descenso controlado.
Desplegó su paracaídas principal y logró estabilizarse pese a un nuevo enredo parcial.
Angus Mitchell aseguró: “El avión tenía daño severo en la cola y un control muy limitado”, tras la salida del último paracaidista.
El piloto mantuvo la calma y buscó un aterrizaje seguro.
La escena obligó a una maniobra de emergencia en Tully.
El avión tocó tierra sin víctimas graves y la tripulación salió ilesa.
La ATSB revisó los protocolos y recomendó más cuidado con arneses y asas.
El informe remarcó que “la comunicación entre piloto y saltadores es vital en situaciones de riesgo”.
El club organizador actualizó su lista de chequeo y exigió llevar cuchillo a todos los saltadores.
La experiencia sirve ahora como ejemplo en capacitaciones dentro y fuera de Australia.
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