Las exportaciones de carne argentina llegarán a USD 3.700 millones en 2025 gracias a precios altos y demanda firme
Actualidad11/12/2025
REDACCIÓN
Carne
Las exportaciones de carne subirán a USD 3.700 millones este año y marcarán un salto del 25% frente a 2024, según estimaciones empresarias.
El avance se apoya en precios internacionales en alza y una demanda que no cede.
Miguel Schiariti explicó que el volumen caerá entre 8% y 10%, ya que China y Estados Unidos atravesaron problemas internos en los primeros meses.
La estacionalidad de Israel también redujo compras.
Mario Ravettino sostuvo que las ventas cerrarán en 700.000 toneladas.
Afirmó que “la cifra en dólares crece, pero la salida en volumen baja respecto del año pasado”.
La mejora de precios cambió el ánimo del mercado.
Schiariti remarcó que “los valores volvieron a niveles de 2022 tras once meses de subas”, apoyados en el índice de la FAO.
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La Bolsa de Comercio de Rosario señaló un escenario de firmeza global por la oferta ajustada.
Ravettino contó que hubo operaciones a USD 18.000 la tonelada en la Unión Europea.
Dardo Chiesa indicó que la oferta mundial se achica por caídas en Estados Unidos, Australia y Brasil, lo que presiona los precios al alza.
El consultor Víctor Tonelli sumó que la demanda creció con fuerza entre consumidores jóvenes.
Tonelli dijo: “Los mercados no tradicionales ahora pesan dos tercios de la demanda mundial”.
El analista describió un salto del consumo ligado al fitness y a estilos de vida activos.
OTRAS NOTICIAS:
La tendencia favorece a la Argentina, que mantuvo libertad para exportar durante los últimos dos años.
Tonelli añadió que “la producción global no acompaña el ritmo de expansión y eso empuja los valores”.
Ravettino advirtió que el país necesita más stock para seguir el ritmo.
Pidió una política que garantice materia prima y otorgue asistencia crediticia, sanitaria y tecnológica.
El sector mira el acuerdo con Estados Unidos para 2026.
Schiariti afirmó: “La Argentina podrá cuadruplicar sus envíos a EEUU con aranceles bajos”, gracias al nuevo cupo de 80.000 toneladas.
El empresario sostuvo que “la demanda norteamericana dependerá del precio que acepte su mercado”, sobre todo por las restricciones de grasa para hamburguesas.
El país busca aprovechar el impulso sin perder competitividad.
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