Puerto Madryn licita fotomultas por dos años y apunta a rutas con siniestros reiterados
Chubut19/12/2025
REDACCIÓN
Fotomultas
El Concejo Deliberante de Puerto Madryn aprobó un pliego de bases y condiciones para convocar a empresas dedicadas al control y fiscalización del tránsito, con el objetivo de instalar equipos de fotomultas en sectores específicos de la ciudad. El esquema previsto se plantea como una contratación por un período acotado, con mirada puesta en áreas donde los incidentes viales se repiten y preocupan por su gravedad.
Según explicó el concejal Federico Garitano en diálogo con #LA17, el proceso habilita una licitación con una duración de dos años, organizada como “1 año más 1 año más opcional”. En esa misma intervención, sostuvo que el sentido del sistema se centra en evitar siniestros, con dispositivos ubicados principalmente en tramos de ruta y accesos.
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“Se va a convocar a empresas que se dediquen a control y fiscalización de tránsito para la posibilidad de colocar equipos de fotomultas”, indicó Garitano. En su descripción, no se trata de sumar cámaras en el centro urbano, sino de actuar en zonas con circulación rápida y con antecedentes de choques y vuelcos.
El concejal ubicó como puntos sensibles los accesos y recorridos muy utilizados por vecinos y trabajadores, como el camino a Solana y el camino a las empresas. “Tenemos varios tramos de ruta donde tenemos lamentablemente estos hechos reiterados”, dijo, al justificar la necesidad de sumar herramientas de control.
En su argumentación, Garitano planteó que el dispositivo funciona como un recordatorio visible que obliga a moderar la marcha. “El cartelito del radar o de fotomulta tiene un objetivo netamente preventivo”, expresó, con una escena familiar para cualquier conductor: aflojar el acelerador cuando aparece la señalización de control.
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El edil también comparó la discusión local con decisiones tomadas en otros distritos y señaló que el uso de radares forma parte de una tendencia que crece. Mencionó que hay provincias y ciudades que ya aplican estos métodos hace tiempo, y que en algunos lugares se volvieron parte de la rutina cotidiana del tránsito.
Garitano destacó que el pliego local se plantea como una experiencia limitada en el tiempo, justamente para evaluar resultados. “Es una prueba que tiene un plazo de 2 años solamente”, remarcó, y dejó abierta la posibilidad de continuidad si el sistema demuestra eficacia en la reducción de siniestros.
El concejal aseguró que el análisis de impacto no se apoya solo en intuiciones, sino también en datos de organismos nacionales. “La estadística de la Dirección Nacional de Tránsito también… en las provincias donde existen este tipo de radares, la cantidad de accidentes ha descendido”, sostuvo, al explicar por qué el municipio mira esta alternativa.
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Otro punto que aparecía en el debate público es el reemplazo de medidas físicas ya instaladas en algunos sectores, como lomos de burro o badenes, que generan quejas vecinales por vibraciones y ruidos. Garitano planteó que los radares pueden funcionar como herramienta de control sin recurrir tanto a obstáculos de ese tipo, aunque dejó claro que el eje principal es la prevención.
La entrevista también puso el foco en un tramo que cada tarde muestra un caudal de tránsito cada vez mayor: la ruta 1 entre la rotonda el acceso a Solana. Garitano coincidió en que el flujo de vehículos es intenso y que la situación se vuelve riesgosa cuando se combina con exceso de velocidad y distracciones.
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En ese marco, el concejal insistió en que la discusión no se resuelve con rechazos automáticos, sino con herramientas concretas para mejorar la seguridad vial. “Todo lo que sea prevención nunca está de más”, expresó, y sostuvo que quienes manejan dentro de las normas no deberían enfrentar problemas con el sistema.
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