El secretario general de la ONU expresó su condena al atentado a una mezquita
Actualidad27/12/2025
REDACCIÓN
Onu
El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas, António Guterres, condenó de manera pública el ataque terrorista que afectó a una mezquita en la ciudad siria de Homs. La expresión de repudio se conoció a través de un comunicado difundido por su portavoz, en el que se remarcó la gravedad del hecho.
El ataque ocurrió durante las oraciones del viernes en la mezquita Ali Bin Abi Talib, ubicada en el barrio de Wadi al-Dahab. La información fue confirmada por el vocero del organismo internacional, Stéphane Dujarric, quien detalló el contexto del atentado y su impacto en la población civil.
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Desde la Secretaría General de la ONU se remarcó que los ataques contra civiles y lugares de culto resultan inaceptables bajo cualquier circunstancia. En ese sentido, el comunicado subrayó la necesidad de que los responsables sean identificados y llevados ante la justicia por los canales correspondientes.
Guterres también manifestó su acompañamiento a las personas afectadas por el ataque. Según el texto difundido, “el secretario general expresa sus condolencias a las familias de los fallecidos y expresa su solidaridad con todos los heridos, deseándoles una pronta y completa recuperación”, en referencia a las consecuencias humanas del atentado.
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Las autoridades sanitarias sirias informaron que el número de muertos asciende a ocho, mientras que varias personas resultaron heridas como consecuencia de la explosión que afectó al edificio religioso. El ataque se produjo en un momento de alta concurrencia, lo que incrementó su impacto.
El pronunciamiento del titular de la ONU se sumó a otras expresiones internacionales de preocupación por la situación de seguridad en Siria. En particular, el organismo volvió a insistir en la protección de la población civil y en el respeto a los espacios religiosos.
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Desde Naciones Unidas se reiteró que los lugares de culto deben permanecer fuera de cualquier tipo de violencia, al tratarse de ámbitos destinados a la práctica espiritual y a la convivencia comunitaria. El ataque en Homs se inscribe en un contexto regional atravesado por episodios de inestabilidad persistente.
El comunicado no brindó precisiones sobre los autores del atentado, pero sí enfatizó la obligación de avanzar en investigaciones exhaustivas. Para la ONU, la rendición de cuentas constituye un elemento central para evitar nuevos hechos de este tipo.
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