Lo mató por la pirotecnia: "Las bombas de estruendo en la puerta de casa me terminaron de enloquecer”
Policiales27/12/2025
REDACCIÓN
Crimen en Navidad
La investigación por el homicidio ocurrido durante la madrugada de Navidad en La Plata sumó definiciones relevantes luego de la indagatoria al acusado. Juan Carlos Magen (68) reconoció ante la fiscalía haber disparado contra su vecino Daniel Néstor Rubén “Pepo” Ramírez (45), en un contexto de conflictos vecinales prolongados y una discusión que escaló en violencia extrema.
El imputado quedó detenido tras el episodio registrado en el complejo habitacional de 4 y 609, en el Barrio Aeropuerto. Según la causa, utilizó una pistola Bersa Thunder calibre .40 para efectuar los disparos que terminaron con la vida del hombre que residía en la planta baja, justo debajo de su departamento.
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Durante la indagatoria, Magen admitió el hecho y explicó su accionar con una frase que quedó incorporada al expediente: “Con esa familia tuve problemas por muchos años. Las bombas de estruendo en la puerta de mi casa me terminaron de enloquecer”. También sostuvo que existían “discusiones de tipo vecinales” por temas de convivencia en el edificio.
La fiscalía, a cargo de Patricio Barraza, imputó al acusado por “homicidio agravado por el uso de arma de fuego y amenazas calificadas”. Además del asesinato, se investiga una intimidación previa contra un hermano de la víctima, a quien Magen habría advertido: “Te voy a matar como a este otro”, cuando intentó frenar la agresión.
Fuentes judiciales señalaron que se trata de un “caso cerrado”, aunque continúan las pericias y la recolección de testimonios para completar las circunstancias de tiempo y lugar. En paralelo, se incorporó al expediente el informe preliminar de la autopsia.
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El estudio forense determinó que Ramírez murió por “shock hipovolémico y hemorragia intratoráxica por pasaje de proyectil”. Los médicos constataron “una herida de proyectil de un centímetro en el tórax, a la altura del esternón”, además de otro disparo en el hombro derecho, y concluyeron que “se trató de una ejecución a corta distancia”.
La reconstrucción judicial ubicó el crimen después de las 0.30 del 25 de diciembre, en un descanso de la escalera que conecta la planta baja con los pisos superiores. Una fuente de la investigación explicó que “fue una misma secuencia en la que amenazó a uno de los hermanos y terminó matando al otro”.
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Antes del ataque, de acuerdo con el propio Magen y otros testimonios, se habían registrado cruces por ruidos molestos. El imputado declaró: “Todo comenzó a la tarde por los ruidos y porque no nos dejaban descansar. Comenzaron desde temprano con los cohetes y la pirotecnia”, y mencionó una llamada al 901, dato que la fiscalía intenta corroborar.
Durante el procedimiento de detención, la Policía secuestró varias armas de fuego en el departamento del acusado, entre ellas otra pistola calibre .40, una escopeta calibre .20 y un rifle de aire comprimido. La fiscalía solicitó informes al registro de armas y presume que el imputado contaba con la documentación correspondiente.
La víctima, conocida como “Pepo”, trabajaba en una cooperativa de servicios y tenía vínculos comunitarios en la zona de Villa Elvira. Estaba casado con Malvina y tenía tres hijos. Ella relató la secuencia final del ataque y afirmó: “No nos dio tiempo a nada: primero tiró seis tiros hacia el hermano de mi marido (…) y luego le tiró a mi marido”, y agregó que, cuando lo vio herido, “se acercó y le dijo ‘¿Todavía estás vivo, vos?’ y le volvió a tirar otra vez”.
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