Una vacuna de ARN mensajero mostró mejor protección contra la gripe en adultos sanos

Actualidad28/12/2025

Vacuna

Un estudio internacional encendió expectativas en la prevención de la gripe al confirmar que una vacuna de ARN mensajero ofrece mejores resultados que las opciones convencionales en adultos sanos, según datos publicados en The New England Journal of Medicine.

El ensayo se realizó durante la temporada 2022–2023 y analizó a 18.476 personas de entre 18 y 64 años en Estados Unidos, Sudáfrica y Filipinas. La investigación comparó una vacuna de ARN mensajero modificado con una formulación tetravalente inactivada de uso habitual, aplicada como control.

Los participantes recibieron una única dosis intramuscular y no habían sido vacunados contra la influenza en los seis meses previos. El objetivo fue medir la eficacia relativa para prevenir cuadros gripales confirmados por laboratorio, a partir de los 14 días posteriores a la aplicación.

El seguimiento se extendió hasta mayo de 2023 y permitió observar diferencias claras. La vacuna de ARN mensajero registró 57 casos de gripe confirmada, frente a 87 en el grupo que recibió la vacuna tradicional, un resultado que marcó una eficacia superior.

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Según el análisis principal, la nueva formulación alcanzó una eficacia relativa del 34,5% frente a la vacuna inactivada. El protocolo del estudio confirmó tanto la no inferioridad como la superioridad del biológico más avanzado, reforzando su potencial preventivo.

La mayoría de los casos detectados correspondió a influenza tipo A, especialmente A/H3N2 y A/H1N1. La baja circulación de influenza B durante esa temporada limitó el análisis sobre esas cepas, aunque los datos también favorecieron a la vacuna de ARN mensajero.

En términos de respuesta inmunitaria, el ensayo evaluó a unos 4.000 participantes. La vacuna experimental generó mayores niveles de anticuerpos y una respuesta celular más intensa, con incremento de linfocitos CD4+ y CD8+ que se sostuvo hasta seis meses después.

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Más del 70% de los vacunados alcanzó niveles seroprotectores frente a los subtipos analizados, con mejores registros ante las cepas A. Este perfil inmunológico sugiere una protección más duradera y consistente, destacaron los investigadores.

En materia de seguridad, las reacciones locales y sistémicas fueron más frecuentes con la vacuna de ARN mensajero, sobre todo dolor en el sitio de inyección, fatiga y cefalea. Los efectos se presentaron como leves o moderados y desaparecieron en pocos días, sin diferencias relevantes en eventos graves.

El estudio no incluyó a mayores de 64 años ni a personas inmunodeprimidas, grupos de mayor riesgo. Aun así, los resultados abren una puerta a nuevas estrategias de vacunación contra la gripe, con tecnologías que permiten una adaptación más rápida a las variantes circulantes.