VIRGINIA RIVAS EVOLUCIONA FAVORABLEMENTE EN CANCÚN

Virginia Rivas, vecina de Rawson, sufrió un accidente cerebrovascular (ACV) y un infarto mientras celebraba su aniversario de matrimonio en México. Su familia, en medio de la incertidumbre, espera la autorización médica para su traslado a la Argentina, y mientras tanto agradecen el apoyo recibido y piden oraciones por su pronta recuperación.

Virginia se encontraba junto a su esposo Raúl en México celebrando su aniversario cuando, un día antes de su regreso, sufrió un ACV y un infarto. Su hija, Yanina Ganga, quien se encuentra en Cancún, compartió cómo están afrontando este difícil momento mientras Virginia permanece hospitalizada, sin poder ser trasladada a Argentina debido a su delicado estado de salud.

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Yanina relató la angustia que están viviendo, ya que no reciben partes médicos diarios, lo que incrementa la incertidumbre. "Tenemos dos horarios de visita solamente: uno a la mañana, en el que entro yo, y otro a la tarde, cuando entra papá. Estamos yendo todos los días al hospital. Acá son dos horas menos, y es muy difícil", expresó.

A pesar de la gravedad del cuadro, Yanina señaló algunos avances en la salud de su madre: "El viernes le quitaron el tubo respirador, lo que nos dio mucha esperanza porque significa que puede respirar por sus propios medios. Pero aún no está estable". La posibilidad de trasladar a Virginia de regreso a Argentina aún no ha sido autorizada, ya que "los médicos quieren que esté más estable y se pueda evaluar mejor las secuelas que haya dejado el ACV", añadió.

Yanina también adelantó que "entendemos que la obra social va a cubrir el traslado, pero no tenemos nada confirmado aún. Lo más importante para nosotros es que se autorice el viaje y poder traerla de vuelta, pero al no tener un diagnóstico confirmado ni el permiso de traslado, todo está en espera".

La situación se complica aún más por la distancia y la soledad que sienten en un país extranjero. Yanina y su padre Raúl están alojados en un departamento en Cancún, gracias a la ayuda de Juan Manuel Arce, un residente de Cancún oriundo de Rawson. "Es nuestro ángel guardián. Lo que nos ha ayudado es impagable, y no tenemos más que palabras de agradecimiento para él", dijo emocionada.

"Agradecemos a todos los que nos han ayudado y siguen enviando sus buenos deseos. Pedimos que quienes crean, nos acompañen en oración para que podamos volver pronto con mamá", concluyó Yanina.