ENCUENTRAN BARCO HUNDIDO CON TESOROS EN EL CARIBE MEXICANO

En Quintana Roo, arqueólogos hallaron barco inglés hundido hace más de 200 años. El descubrimiento revela vestigios en una zona de arrecifes de Quitasueños.

Actualidad25 de octubre de 2024Sergio BustosSergio Bustos
barco hundido
El barco hallado.

El naufragio se registró en una de las áreas más peligrosas del Caribe. El barco permaneció oculto bajo el agua por más de dos siglos. Los arrecifes de Quitasueños son famosos por haber causado numerosos desastres marítimos.

Un pescador local, Manuel Polanco, avistó los restos del barco. Polanco notificó al Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH), que inició la investigación. En su honor, el naufragio recibió su nombre.

El velero data de finales del siglo XVIII o principios del XIX. Los arqueólogos hallaron un ancla, un cañón y lingotes de hierro utilizados como lastre. Estos objetos ofrecen pistas para identificar la embarcación.

El casco de madera del barco no se conservó. Las duras condiciones del mar y el paso del tiempo lo desintegraron por completo. Sin embargo, los objetos metálicos se mantuvieron en mejor estado.

El equipo de arqueología subacuática enfrenta desafíos significativos. La fuerte corriente marina dificulta las operaciones de buceo en el sitio. Los arqueólogos deben limitar el tiempo bajo el agua.

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El arrecife de coral representa otro obstáculo. El equipo debe tener extrema precaución para no dañar el frágil ecosistema marino. Las operaciones requieren técnicas no invasivas.

El descubrimiento del barco ofrece una ventana al pasado naval europeo. El cañón y el ancla sugieren un barco robusto, posiblemente comercial o militar. Los lingotes de hierro indican la necesidad de estabilizar la nave.

Hasta el momento, se han realizado dos sesiones de buceo. Los arqueólogos realizaron una inspección preliminar y evaluaron los restos. La investigación se encuentra en una fase inicial.

El lugar del hallazgo, Banco Chinchorro, es un cementerio de barcos. Hasta la fecha, se han registrado 70 naufragios en sus aguas. La zona ha sido testigo de numerosas tragedias navales.

El arrecife de coral de Quitasueños es extremadamente traicionero. Muchos navegantes se aventuraron en sus aguas sin tecnologías modernas de navegación. Los naufragios eran frecuentes en siglos pasados.

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Laura Carrillo, del INAH, lidera el proyecto de investigación. Carrillo destaca los retos que presenta el sitio debido a las condiciones adversas. El equipo busca comprender mejor la historia del barco.

La arqueología subacuática requiere tecnología avanzada. El equipo utiliza herramientas de mapeo y técnicas para preservar los restos. Buscan recopilar información sin alterar el entorno.

La investigación también enfrenta la falta de materiales delicados. Los restos de madera no se conservaron, lo que dificulta la reconstrucción. Los objetos metálicos proporcionan las únicas pistas disponibles.

El hallazgo podría arrojar luz sobre rutas comerciales antiguas. Los barcos ingleses navegaban el Atlántico en busca de nuevas rutas y territorios. El naufragio ilustra los riesgos de la navegación en el Caribe.

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Los arqueólogos esperan descubrir más objetos en futuras inmersiones. El análisis de los artefactos hallados podría revelar el destino de la tripulación. La investigación continuará en las próximas etapas.

La conservación de los hallazgos es una prioridad. El equipo trabaja para preservar los objetos metálicos encontrados en el arrecife. Los restos serán restaurados y exhibidos en un museo.

   

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