MACRI CRITICA DURAMENTE LA GESTIÓN DE RIQUELME EN BOCA

Mauricio Macri, expresidente de Boca Juniors, expresó su profunda preocupación por el rumbo actual del club. En una entrevista reciente, Macri apuntó contra Juan Román Riquelme, acusándolo de llevar a Boca a una situación de "personalismo enfermizo".

Macri, quien dirigió a Boca entre 1995 y 2007, no ocultó su decepción. “Venía en estado de ánimo positivo y me llevás a este momento de tristeza”, expresó al ser consultado sobre el presente de la institución.

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Comparación con su gestión

El exmandatario señaló que Boca, durante su gestión, fue número uno del mundo sin caer en personalismos. Recordó los éxitos deportivos, destacando que el club "no pertenecía a un presidente ni a los jugadores".

Macri afirmó que la administración actual ha hecho "daño a Boca". Subrayó que la conducción de Riquelme provoca "destrato hacia afuera y hacia adentro". Comparando con la política nacional, Macri indicó que el país "tiene rumbo" bajo la presidencia de Javier Milei, pero que Boca no cuenta con ese norte.

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Un pasado glorioso en contraste

Macri recordó que bajo su gestión Boca fue el único equipo en ganarle una final al Real Madrid en décadas. Para él, los logros no habrían sido posibles en un ambiente de divisiones internas.

Esta no es la primera vez que el expresidente critica al ídolo boquense. Tras la última derrota de Boca en el superclásico contra River, Macri expresó en redes sociales su malestar por la situación. La relación entre Macri y Riquelme no ha sido fácil. El expresidente recordó que las diferencias existen desde los tiempos en que Riquelme era jugador, pero que se han intensificado en los últimos años.

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Un club o una plataforma política

La actual conducción, según Macri, no prioriza el interés común. Considera que el equipo sufre por disputas internas que afectan el desempeño en la cancha. Macri asegura que ha recibido comentarios de muchos socios preocupados por la situación. Para él, los hinchas sienten que el club ha perdido su identidad.

El empresario cree que, de continuar esta conducción, Boca podría alejarse de la competitividad que históricamente lo caracterizó. “Me duele en el alma”, concluyó. Por último, Macri subrayó que el desafío de Riquelme será demostrar que su gestión está a la altura de lo que Boca representa en el mundo.