


QUIÉN ES EL PILOTO AL QUE ACUSAN DE DESVIAR FONDOS DE UNA CAMPAÑA SOLIDARIA
Martín Ponte ex piloto de TC, enfrenta un escándalo. El caso se conoció cuando se advirtió que los datos bancarios de una campaña solidaria estaban cambiados.
Actualidad21/01/2025

Las acusaciones en su contra lo vinculan con una supuesta estafa en una campaña solidaria destinada a Nicanor, un niño de siete años que padece leucemia linfoblástica aguda.
Según las denuncias, Ponte habría desviado los fondos recaudados para su propio beneficio, utilizando el caso como fachada para obtener dinero mediante transferencias a su cuenta personal.
El caso salió a la luz cuando la madre de Nicanor advirtió que los datos bancarios en los flyers de la campaña habían sido manipulados.
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Entre los donantes engañados se encuentran destacados referentes del automovilismo como Emanuel Moriatis, José Manuel Urcera y Facundo Chapur, quienes transfirieron importantes sumas sin saber que el dinero no llegaba a su destinatario original.
La situación generó indignación en el ambiente deportivo y llevó a que la Asociación Corredores Turismo Carretera (ACTC) declarara a Ponte persona no grata, prohibiéndole el acceso a los autódromos.
Ponte, de 39 años y oriundo de Concordia, Entre Ríos, tuvo una carrera como piloto, logrando triunfos importantes en Buenos Aires, incluido un memorable desempeño en los 1000 kilómetros de 2018 como invitado de Agustín Canapino.
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Tras retirarse en 2019, se volcó al periodismo automovilístico, colaborando como comentarista. Sin embargo, esta trayectoria quedó opacada por el escándalo actual, que suma a su historial rumores de manejos financieros cuestionables.
A pesar de las denuncias, el ex piloto no ha emitido declaraciones públicas y ha cerrado su cuenta de Instagram, manteniéndose en silencio ante las graves acusaciones. En contraste, su padre devolvió parte de los fondos desviados, que posteriormente fueron redirigidos a la cuenta de la madre de Nicanor.
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El desenlace del caso aún está por definirse, mientras el niño y su familia continúan su lucha en Buenos Aires, recibiendo tratamiento en el Hospital Garrahan.



