Riquelme de espaldas imagen ilustrativa AI
La reciente eliminación de Boca Juniors en la Copa Libertadores a manos de Alianza Lima sigue generando repercusiones y críticas dentro del mundo xeneize. En esta ocasión, José Basualdo, exfutbolista del club y campeón de América en el 2000, apuntó directamente contra Juan Román Riquelme, cuestionando su liderazgo y su manejo como dirigente.
En declaraciones radiales, Basualdo fue contundente: “Como dirigente, no me transmite nada. Tiene que dejar su ego y pensar más en Boca”. Además, expresó su decepción con la gestión del ídolo boquense: “Deja mucho que desear y nada que ver con lo que uno pensó que podía hacer. Dice una cosa y después hace otra”.
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El malestar de los hinchas por la situación deportiva del club no pasa desapercibido para el exjugador, quien remarcó la importancia de la presión de los simpatizantes en este momento clave: “El crédito se lo va a dar la gente. Es la que tiene que presionar para que dé un paso al costado o enderece este barco, porque lo que está pasando es muy lamentable”.
Basualdo también recordó que Riquelme, antes de asumir en la dirigencia, era crítico con la conducción del club y ahora repite algunos de los errores que cuestionaba: “Cuando no estaba en el club, se quejaba, y ahora hace eso mismo”.
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En cuanto a posibles soluciones, Basualdo sugirió que Riquelme debería escuchar más y rodearse de mejores asesores. “Tiene que ser más abierto, sin tanto ego. Si no escucha y siempre va a hacer lo que él dice… Que busque un buen asesor y ojalá que cambie por el bien del equipo y del club. Si no, que deje a gente capaz de volver todo a la normalidad”, advirtió.
El exfutbolista también cuestionó la falta de protagonismo del equipo a nivel internacional, afirmando que “hace dos años que Boca no juega algo importante. La séptima (Libertadores) cada vez queda más lejos, no porque no tengamos equipo, sino porque directamente ya no la jugamos”.
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Basualdo también opinó sobre el papel de Fernando Gago como entrenador en la reciente eliminación y consideró que su falta de firmeza lo llevó al fracaso: “Se metió solo en la guillotina y se cortó la cabeza. Cedió demasiado, no fue claro y por las ganas de querer dirigir a Boca como sea, lo llevó a otra derrota”.
Según el exjugador, la dirigencia apostó por Gago más por su identificación con el club que por su capacidad: “Lo trajeron porque era de la casa. Sabían que (Martín) Palermo y el ‘Mellizo’ (Guillermo Barros Schelotto) no iban a ir. El único más o menos era Gago”.
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