


El secretario de Pesca del Sindicato de Obreros Marítimos Unidos (SOMU), Juan Navarro, sostuvo en una entrevista con El Quinto Poder por #LA17 que el conflicto salarial que atraviesa el sector pesquero en Chubut continúa estancado por “la falta de voluntad de diálogo” por parte de las cámaras empresarias. “Estamos prestos a negociar, pero ellos no quieren hablar”, afirmó, y anticipó que si no hay avances en los próximos días, el gremio podría avanzar con medidas de fuerza que afectarían a botelleros y merluceros.
Durante la entrevista, Navarro remarcó que la única propuesta concreta hasta ahora fue presentada por el SOMU, y que el planteo central es “la actualización del salario básico” para toda la flota. “No se trata de empresas individuales, nosotros dialogamos con cámaras. Pero si los trabajadores se desunen, terminan perdiendo todos”, advirtió.
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El dirigente criticó especialmente la posición de la Cámara Patagónica de Empresas de Pesca (CAPECA) y otras cámaras que agrupan a buques congeladores. “La negativa viene de ahí. Ellos sostienen que los costos laborales son altísimos, pero no presentaron ningún dato concreto”, aseguró.
Navarro acusó a las patronales de presionar a los trabajadores con maniobras oportunistas, como la apertura anticipada de la zona 41 de pesca. “Aprovecharon la necesidad de la gente para dividirnos”, denunció, y llamó a resistir cualquier intento de quebrar la solidaridad del sector. “Nos bajan el sueldo a uno y se lo bajan a todos”, insistió.
En relación con los convenios laborales, aclaró que existen diferencias entre las condiciones de la flota amarilla y los buques congeladores, pero que “los básicos son uno solo para todas las flotas” y deben respetarse. En ese sentido, señaló que el gremio está dispuesto a acompañar gestiones para reducir las cargas fiscales del sector si eso contribuye a mejorar las condiciones laborales. “Propusimos acompañarlos para pedir la baja de retenciones, pero no hubo respuesta”, indicó.
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El dirigente también confirmó que la investigación del SOMU sobre el impacto real de los costos laborales arroja que estos no superan el 18%, lejos del 50 o 60% que alegan algunos empresarios. “Les pedimos documentación, pero no presentaron nada”, denunció.
Finalmente, Navarro no quiso precisar cuánto podría durar el conflicto, pero advirtió que si las cámaras no revierten su postura, “pararemos los barcos”. “Veremos en estos días qué medidas tomamos si no ceden”, concluyó.







