


María Laura Barcia llegó al estudio de #LA17 con su remera de Patagonia Run. Se sentó al micrófono como periodista y locutora, pero también como corredora. Contó su historia laboral, su vínculo con la radio y su transformación física y emocional desde que empezó a correr.
Nació en Río Gallegos, pero eligió estudiar locución en Trelew. Supo que el Instituto Superior de Formación Docente Artística 805 ofrecía la carrera avalada por el ISER y se quedó. Hoy trabaja en Jornada Medios y llegó a ser docente en el lugar donde estudió.
“Tuve la fortuna de empezar a laburar muy rápido en esto que me gustaba desde siempre”, dijo. Valoró el ambiente laboral, el crecimiento profesional y la posibilidad de contar historias. En paralelo, desarrolló una nueva pasión: correr.
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Hace dos semanas, participó en Patagonia Run en San Martín de los Andes. Corrió 70 kilómetros de montaña, con 4.200 metros de desnivel acumulado. Tardó 15 horas y media. Lo vivió como una de las experiencias más fuertes de su vida, solo comparable con el nacimiento de su hijo.
“Me convertí en ultra trailrunner”, resumió. En la misma competencia ya había corrido 42 km el año anterior. A lo largo de los últimos cuatro años, fue progresando desde sus primeros 5K, a 10K, varias medias maratones, varios 42K y todas las distancias que le ofreció Destino Madryn hasta llegar a los 50K. Pero después de esta última experiencia dijo: “Volví con tanta paz, con tanta oxigenación, que decidí ir por más”.
Se preparó durante varios meses con el acompañamiento y entrenamiento de su pareja. Eligió hacerlo así. Mariano,también ultra trailrunner corrió las 100 Millas. “Yo tenía que hacer mi carrera”, sostuvo. Se enfrentó a tres cumbres y caminos técnicos. Dijo que la disciplina y la organización fueron claves.
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“Soy una persona común y corriente. Laburo 8 o 10 horas. A veces con tacos, arreglada, en la calle, parada o sentada. Pero me doy mi tiempo”, contó. Corre antes o después del trabajo. Se entrena, inculca la importancia de hacer deporte a su hijo, y lo acompaña sus partidos de fútbol.
“Correr me ayudó a confiar en mí misma. A amigarme con mi cuerpo. A cambiar mi estilo de vida”, dijo. Recordó sus primeros pasos con emoción. Una amiga le mandó una foto de su debut en los 10 km. Ahora mira con cariño los 110 km.
Para esta carrera, modificó su alimentación y su rutina de descanso. A lo largo de los años también aprendió a comer sin culpa. “Hoy disfruto de una comida con mi hijo o mi familia como un momento social”, sostuvo. Valoró la importancia del entorno que la apoya.
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Aseguró que correr le cambió la vida. “No corro por el podio. Corro por lograr el objetivo que me propongo. Esa es mi medalla”, expresó. En Destino Madryn, hizo podio en 25 km. Pero no fue su motivación. “Me mueve llegar a la meta”, afirmó.
Antes de despedirse, dejó una invitación. “Cuando quieras, te sumás a correr. Empezamos con caminata. Pero hay que moverse”, dijo entre risas quien combina su pasión por la comunicación y las competencias atléticas.







