Hernán Giannotta
Puerto Madryn atraviesa una situación crítica en torno al servicio funerario. La empresa CEMAD S.A., a cargo de las salas velatorias desde 1997, volvió a insistir con su pedido para ampliar sus instalaciones ante una demanda creciente que ya supera la capacidad disponible. Pero el debate quedó trabado entre resistencias vecinales, indefiniciones del Concejo Deliberante y posturas contrapuestas dentro del Ejecutivo municipal.
“La ciudad creció mucho, pero las salas velatorias no. Hoy no damos abasto”, explicó Hernán Giannotta, presidente de CEMAD, en una entrevista con #LA17. Según el empresario, la iniciativa de construir cinco nuevas salas responde a una necesidad insoslayable: “Desde hace cinco años buscamos un terreno, pero en cada zona aparecen objeciones”.
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La última propuesta fue rechazada en el Concejo Deliberante, donde no se alcanzaron los dos tercios necesarios para aprobar la cesión de un lote en el barrio Comercio. Aunque el proyecto no incluía la instalación de un crematorio, los vecinos del sector manifestaron su rechazo, recordando que ya conviven con piletas de aireación y temen nuevas molestias.
“No se quiere tener una sala velatoria cerca de casa. Nadie quiere ese tipo de vecino”, resumió Giannotta. La polémica resurge con cada intento de ampliación. En 2010, CEMAD instaló un horno crematorio que jamás pudo habilitar por objeciones similares. “Hoy tenemos 20 cremaciones por mes, y no tenemos dónde hacerlas”, agregó.
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La empresa presentó una nueva propuesta: construir salas velatorias en la intersección de Juan XXIII, Simón de Alcazaba y Alberto Williams, con un compromiso adicional de prestar 150 servicios gratuitos durante los próximos diez años para personas en situación de vulnerabilidad.
El oficialismo buscará consensos en comisiones para lograr la aprobación. Sin embargo, el concejal Cuis Taccari planteó una alternativa: que el Municipio construya sus propias salas velatorias, bajo gestión pública. La propuesta será evaluada, pero no tiene plazos definidos.
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Por su parte, el intendente Gustavo Sastre aclaró que “nunca se habló de un crematorio” en el nuevo proyecto y defendió la transparencia del proceso. Aun así, las voces críticas insisten en que el tema no fue suficientemente debatido y que el cambio de lote generó desconfianza.
Con el invierno acercándose y la infraestructura colapsada, el debate por el servicio funerario en Puerto Madryn se transformó en una urgencia. “El crecimiento de la ciudad exige soluciones. No podemos seguir postergando esta discusión”, advirtió Giannotta.
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