


El gasto en subsidios económicos acumula una fuerte contracción en lo que va del año. Según el Informe de Tarifas y Subsidios N.º 26 elaborado por el Observatorio de Tarifas del IIEP (UBA-CONICET), entre enero y mayo de 2025 el Gobierno Nacional destinó $2,18 billones a subsidiar servicios de energía, transporte y agua, lo que representa una caída real del 68% interanual. El recorte es consistente con el plan de ajuste fiscal y reducción del déficit primario impulsado por el Ejecutivo.


La reducción del gasto es transversal a todos los sectores, aunque la energía eléctrica y el gas natural concentran el mayor peso de la baja: los subsidios al sector energético cayeron un 77% en términos reales, mientras que el transporte registró una merma del 35%. En el caso del agua y saneamiento, directamente se eliminaron los subsidios por completo, algo que no ocurría desde hace más de una década.
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Pese al recorte, las tarifas aún no cubren el costo pleno de los servicios públicos, especialmente en los sectores de ingresos medios y bajos. En el caso de la electricidad, los hogares de mayores ingresos (N1) cubren el 46% del costo con su tarifa, mientras que los de ingresos bajos (N2) sólo afrontan el 23%. Para el gas natural, los porcentajes son algo más altos: el segmento N1 paga el 84% del costo, mientras que N2 y N3 cubren apenas el 21% y el 27%, respectivamente.
Esto refleja que, aunque hay una corrección tarifaria en marcha, el Estado sigue participando activamente del financiamiento del sistema energético, aunque con menor intensidad y mayor segmentación.
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El sistema de transporte también experimentó un ajuste en los subsidios, aunque menos abrupto que en la energía. En mayo, el costo técnico promedio del boleto en el país fue de $1.420, mientras que el pasaje efectivamente abonado por los usuarios fue considerablemente inferior: $1.117 en el interior, $450 en CABA y alrededor de $370 en líneas nacionales del AMBA.
Esta brecha se cubre parcialmente con subsidios, que siguen siendo más altos en el Área Metropolitana que en el resto del país, consolidando una asimetría histórica entre regiones. El informe advierte que estas diferencias impactan de forma directa en la economía de los usuarios frecuentes, sobre todo en zonas donde el sistema no cuenta con apoyo local ni tarifas diferenciales.
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El servicio de agua y saneamiento presenta el recorte más extremo: los subsidios fueron eliminados por completo en 2025, según indica el informe del IIEP. Esto generó un traslado total de los costos a los usuarios, cuyas tarifas alcanzaron valores récord. En el AMBA, un hogar sin subsidio paga mensualmente $32.253, un salto significativo respecto a los niveles históricos.
A pesar de los aumentos, el informe señala que el gasto total de un hogar en servicios públicos representa actualmente el 11,6% del salario promedio registrado ($1.432.538) tomando la referencia de CABA. El transporte se lleva la mayor parte, con el 38% del total, seguido por electricidad y gas. Esta proporción refleja un escenario de tarifas en recuperación, pero todavía por debajo de los niveles reales registrados en 2019.
Fuente: Observatorio de Tarifas del IIEP, UBA-CONICET











