Cae la natalidad en Argentina
En un contexto nacional donde la natalidad atraviesa una de sus caídas más significativas de las últimas décadas, la provincia del Chubut muestra una tendencia a la baja, aunque en niveles menos severos que otros puntos del país. Si bien el número de nacimientos cayó un 49% en Chubut, este descenso es moderado en comparación con provincias como Tierra del Fuego o Santa Cruz, donde la reducción supera el 60%.
Este fenómeno responde a un conjunto de factores que van desde una mayor disponibilidad de métodos anticonceptivos hasta la implementación de políticas públicas como la Educación Sexual Integral (ESI), que ha logrado instalar nuevos paradigmas en materia de salud sexual y reproductiva.
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A ello se suma un cambio cultural más profundo, asociado a las decisiones personales de las mujeres en torno a la maternidad, muchas de las cuales eligen postergarla en función de su desarrollo educativo y profesional. “Muchas mujeres priorizan su desarrollo personal y profesional”, sintetizó.
En línea con esta evolución, en Chubut se logró una importante disminución del embarazo adolescente. Desde 2005 hasta la fecha, la tasa se redujo en un 64%, un dato que da cuenta de la eficacia de las políticas preventivas aplicadas tanto en el sistema de salud como en el educativo. Escuelas, centros de salud y campañas de información han sido clave para brindar herramientas concretas a niñas y adolescentes, y contribuir así a una toma de decisiones más informada y autónoma.
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Por otro lado, la interrupción voluntaria del embarazo como otro de los elementos relevantes a la hora de comprender la transformación de los indicadores de natalidad. “La realidad es que el aborto existió siempre, pero bueno, ahora se lleva un registro mucho más fidedigno”, expresó.
Según explicó, la legalización del aborto no solo ha permitido visibilizar un fenómeno histórico que antes se ocultaba, sino que también ha reducido la mortalidad materna asociada a procedimientos clandestinos. Con la implementación de protocolos de atención en hospitales y centros de salud, las mujeres pueden hoy acceder a un entorno seguro y regulado que garantiza sus derechos y su integridad.
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