Delincuentes usan alquileres temporarios para robar casas y estafar inquilinos

Mientras crece la oferta de alquileres temporarios por el receso invernal, también se multiplican los casos en los que los delincuentes usan este sistema para delinquir. La advertencia fue realizada por Matías Ezequiel Luque, abogado penalista y emprendedor del rubro, quien remarcó que “los estafadores están a la orden del día”.

Muchos propietarios optaron por alquilar sus viviendas de forma amoblada y por periodos cortos, pero no todos consideran los riesgos asociados. Luque explicó que al ofrecer propiedades por redes sociales, se exponen a personas que simulan ser inquilinos y luego se retiran con electrodomésticos, muebles y otros bienes de valor.

El profesional recomienda solicitar documentación detallada a quienes desean alquilar: DNI escaneado de ambos lados, comprobantes de ingresos y una seña previa por transferencia. Esa práctica ayuda a verificar la identidad, pero no es infalible. “Amueblar un departamento cuesta mucho y vos le estás dando la llave a una persona que puede ser un delincuente”, subrayó.

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Otro método detectado consiste en alquilar por meses inmuebles en barrios cerrados para usarlos como búnkeres o puntos de acopio. En esos casos, los delincuentes pagan en dólares por adelantado y mantienen una fachada legal, mientras generan robos desde el mismo lugar. Luque afirmó que colegas suyos sufrieron este tipo de hechos en La Plata y alrededores.

El contrato escrito y la recopilación de datos del inquilino resultan fundamentales para evitar ser implicado penalmente. Incluir cláusulas que prohíban usos comerciales o ilícitos puede respaldar al propietario ante la Justicia. Sin embargo, “el olfato también cumple un rol”, dijo Luque, quien recomienda prestar atención al diálogo previo con cada interesado.

Otro riesgo frecuente son las estafas dirigidas a potenciales inquilinos, que terminan transfiriendo dinero por viviendas que no existen. En estos casos, se crean perfiles falsos con fotos reales robadas, se exige una seña inmediata y luego se corta el contacto. También se utiliza la excusa de enviar links que, en realidad, buscan acceder a datos bancarios o cuentas de mensajería.

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Para detectar estafas, es fundamental verificar la antigüedad y actividad de las cuentas en redes, y no apurarse ante frases como “hay otros interesados”. Luque recomienda buscar las imágenes ofrecidas en Google y ver si están publicadas en otros perfiles. “Si te apurás, podés perder todo el dinero”, advirtió.

Cambiar la cerradura o combinación del ingreso luego de cada estadía también puede evitar robos posteriores. En muchos casos, los ladrones hacen copias de llaves durante su estadía para regresar tiempo después sin forzar puertas. “El propietario jamás pensaría que el ladrón fue quien estuvo ahí antes”, explicó el abogado.

Finalmente, recomendó prestar atención al comportamiento digital: seguidores falsos, cuentas nuevas y mensajes insistentes suelen ser señales de alerta. Incluso una cuenta con miles de seguidores puede ser falsa. “Muchos abren el perfil un día antes y compran 70 mil seguidores. Caés porque pensás que es real”, concluyó.

Fuente: NA.