

River y San Lorenzo no se sacaron diferencias en un partido apagado que terminó sin goles en el estadio Monumental. La falta de profundidad fue constante durante los 90 minutos, con escasas situaciones claras para romper el empate. El resultado dejó al Millonario como líder de la zona B, pero con sabor a poco.


La única gran emoción llegó sobre el final, cuando Giuliano Galoppo conectó de cabeza un centro preciso desde la izquierda. El volante llegó sin marca al área chica, pero su remate fue bien contenido por el arquero visitante, Orlando Gill. Esa intervención salvó al Ciclón de una derrota en el último suspiro.
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Antes, River había gritado un gol que no fue. Enzo Pérez sacó un derechazo potente desde afuera del área, pero la jugada fue anulada por un fuera de juego previo. La polémica quedó instalada, aunque la decisión fue rápida y sin revisión prolongada.
El partido también tuvo que lamentar la lesión de Maximiliano Salas, que debió salir promediando el primer tiempo. Miguel Borja entró en su reemplazo, aunque su presencia no logró torcer el trámite. El colombiano estuvo activo, pero no encontró espacios.
Uno de los momentos más esperados por el público fue el ingreso de Juanfer Quintero, que volvió a vestir la camiseta de River. El colombiano ingresó por Lencina en el segundo tiempo, iniciando así su tercer ciclo en el club. Se mostró participativo, aunque sin la chispa que lo caracterizó en el pasado.
Pity Martínez también tuvo minutos y protagonizó una de las pocas jugadas destacadas del complemento. Recibió sobre la derecha, enganchó para su pierna hábil y remató con fuerza, pero la pelota se fue muy arriba. “Era buena”, murmuraron desde el banco, reflejando la sensación de todos.
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River buscó hasta el final, pero chocó con un San Lorenzo bien plantado en defensa y firme en los duelos. A pesar de los cambios ofensivos de Gallardo, el gol no llegó. El equipo mantuvo el invicto, pero se fue con bronca por haber dejado puntos en casa.
San Lorenzo, en cambio, se llevó un punto valioso y sigue sin perder en el torneo. El conjunto dirigido por Damián Ayude sumó cinco unidades y continúa como escolta. No arriesgó demasiado, pero cumplió con su objetivo.
Ambos equipos ya piensan en la próxima fecha: River visitará a Independiente y San Lorenzo será local ante Vélez. Con el torneo recién comenzado, cada punto empieza a pesar. El empate dejó la tabla apretada, pero el invicto sigue siendo una pequeña alegría.

















