Falleció Javier Herrera Bravo, ex secretario de Legal y Técnica de la Presidencia

Javier Herrera Bravo, ex secretario de Legal y Técnica del gobierno de Javier Milei, falleció a los 57 años tras una larga enfermedad. Su deceso fue confirmado por allegados y fuentes oficiales durante la mañana, generando una serie de mensajes de condolencia por parte de dirigentes políticos y funcionarios.

Herrera Bravo había renunciado a su cargo en abril de este año por razones de salud, tras apenas cuatro meses de gestión. Su salida fue formalizada mediante el Decreto 252/2025, firmado por el presidente Javier Milei y el jefe de Gabinete, Guillermo Francos. Su lugar fue ocupado desde entonces por María Ibarzabal Murphy, una abogada cercana al Presidente y actual encargada de la redacción de las principales iniciativas normativas del Ejecutivo.

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El abogado fue una figura relevante durante los primeros meses del mandato libertario, en los que se delinearon instrumentos clave como el DNU inicial, la Ley Bases y la reforma política impulsada por el oficialismo. Aunque su gestión fue breve, su impronta técnica se hizo notar en los borradores fundacionales del gobierno actual.

Con una amplia trayectoria como especialista en Derecho Público, Herrera Bravo también se había desempeñado en funciones técnicas durante el gobierno de Cambiemos. Desde Casa Rosada, colaboró en tareas normativas y jurídicas bajo perfil, siendo reconocido por su precisión jurídica y profesionalismo.

Su carrera fue respetada tanto por colegas del ámbito jurídico como por funcionarios de distintos signos políticos. Su paso por el Estado combinó la rigurosidad académica con la implementación práctica de normas complejas en momentos institucionales sensibles.

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La noticia de su muerte fue recibida con pesar en distintos espacios políticos. Desde el oficialismo, funcionarios de la Casa Rosada y del Congreso destacaron su compromiso institucional y su aporte técnico en momentos fundacionales de la actual administración.

Su muerte deja un vacío entre quienes valoraban su solvencia técnica y su estilo reservado pero eficiente. El mundo jurídico y político pierde a un actor que, sin ocupar el centro del escenario público, fue clave en decisiones estructurales de los últimos años.