Trump contradice a Netanyahu y afirma que Gaza vive “una auténtica hambruna”

Donald Trump rompió con su tono habitual y lanzó una advertencia directa: “Gaza está sufriendo una auténtica hambruna”. Desde Escocia, el presidente de Estados Unidos reclamó a Benjamin Netanyahu que permita el ingreso de alimentos a la población palestina y aseguró que su gobierno abrirá centros de distribución para asistir a los afectados.

“Quiero que se asegure de que reciben la comida”, insistió Trump, visiblemente conmovido por las imágenes de niños desnutridos que circulan en redes sociales. El giro en su discurso marcó un contraste con la postura ambigua que había mostrado días atrás, cuando consideró inevitable el desenlace violento de la guerra entre Israel y Hamás.

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Las declaraciones también reflejan un nuevo quiebre con Netanyahu, quien el domingo negó la existencia de hambruna en la Franja de Gaza. “No lo sé. Basándome en la televisión, diría que no”, respondió Trump con ironía. “Particularmente porque esos niños parecen desnutridos”, agregó.

Mientras tanto, Israel comenzó a lanzar ayuda desde el aire y habilitó pausas limitadas de 10 horas diarias para distribuirla en tres zonas pobladas. A pesar de eso, la presión internacional sigue creciendo. El presidente egipcio Al Sissi fue contundente: “Trump es el único que puede detener la guerra”.

La Casa Blanca aún no dio detalles sobre los centros de distribución prometidos. Tampoco quedó claro si estarán a cargo de personal militar o de organismos civiles. Lo que sí dejó en evidencia la visita de Trump a Reino Unido es el malestar con su par británico, Keir Starmer, quien exigió mayor firmeza ante la situación en Gaza y respaldó el reconocimiento de un Estado palestino.

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Trump, fiel a su estilo, evitó definiciones sobre la solución de dos Estados y minimizó la decisión de Francia de reconocer a Palestina: “No tiene ningún peso”, afirmó. Ni siquiera quiso opinar sobre la postura de Starmer. “No me importa que tome una posición”, sentenció.

En paralelo, la Asamblea General de la ONU sesionaba en Nueva York para debatir una salida al conflicto. Ni Estados Unidos ni Israel participan del encuentro, que busca reimpulsar una paz duradera en Medio Oriente. Las bombas, sin embargo, no se detienen.

Fuente: Euronews