El Gobierno avanza con la privatización de Enarsa y pone en venta su parte en Transener
Actualidad28/07/2025
REDACCIÓN
El Gobierno inició la privatización de Enarsa vendiendo su parte en Citelec.
El Gobierno activó el proceso de privatización de Enarsa con la venta de su participación en Citelec S.A., compañía que controla Transener, operadora clave del sistema de transporte de energía eléctrica en alta tensión.
La resolución 1050/2025 oficializó la medida en el Boletín Oficial. La venta forma parte de un plan más amplio que busca reducir la presencia estatal en sectores estratégicos. La decisión excluye cualquier programa de propiedad participada, por lo que no se reservarán acciones ni para empleados ni para el Estado.
Citelec posee el 52,4% de Transener, que administra más de 14.000 km de líneas de 500 kV en todo el país. Además, tiene acciones en Transba, encargada del transporte troncal en Buenos Aires. Esto convierte a la operación en una de las más relevantes del mercado eléctrico argentino.
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La privatización se llevará adelante a través de un concurso público nacional e internacional, coordinado por la Agencia de Transformación de Empresas Públicas. El plazo para completar la operación es de ocho meses.
Pampa Energía, actual socio minoritario en Transener, podría aumentar su control, aunque aún no hay confirmaciones oficiales sobre nuevos oferentes. Fuentes del sector aseguran que grupos internacionales ya analizan la convocatoria.
El Gobierno afirma que la venta permitirá modernizar el sistema y atraer inversiones privadas. Sin embargo, algunos especialistas advierten que la salida del Estado podría afectar la planificación energética y el control de tarifas.
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El proceso llega en un contexto de alta demanda, déficit estructural y necesidades urgentes de inversión en infraestructura eléctrica. También forma parte de un paquete más amplio que contempla otras privatizaciones, como las de AySA, Belgrano Cargas y Correo Argentino.
La decisión marca un cambio de época en el rol estatal dentro del sistema energético. Lo que está en juego no es solo la venta de acciones, sino el futuro del control sobre una red que abastece a millones de hogares e industrias.
Fuente: Infoenergía
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