Boric, Lula, Sánchez y Petro lanzan frente global contra el odio y los extremismos

Cinco líderes progresistas alzaron la voz en conjunto. Gabriel Boric, Pedro Sánchez, Lula da Silva, Gustavo Petro y Yamandú Orsi sellaron una alianza política para frenar el avance del autoritarismo global y defender la democracia con propuestas concretas.

“La democracia ya no se derrumba con tanques. Se erosiona con odio, concentración del poder y desinformación”, advirtió Boric desde el Palacio de La Moneda, en Santiago de Chile.

El encuentro, titulado “Democracia siempre”, reunió a los presidentes de Chile, España, Brasil, Colombia y Uruguay, quienes buscaron enviar un mensaje directo: la democracia necesita acción, no solo discursos.

Pedro Sánchez apuntó sin rodeos contra lo que llamó “la internacional reaccionaria del odio y la mentira”. Lula fue más lejos: “Vivimos una nueva ofensiva antidemocrática. Hay que actuar ya.”

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Los cinco mandatarios coincidieron en que la pérdida de credibilidad de los partidos políticos abrió la puerta a los extremismos. El diagnóstico fue compartido y asumido sin eufemismos.

“El sistema político cayó en descrédito. Por eso crece la ultraderecha”, admitió Lula, quien reclamó acciones coordinadas para recuperar el vínculo con la sociedad.

Uno de los ejes centrales fue la reglamentación de las plataformas digitales. Según Lula, las redes deben garantizar transparencia y no convertirse en canales de manipulación.

“La gobernanza digital global es urgente. No se trata de censura, sino de proteger la democracia”, remarcó el presidente brasileño.

Gustavo Petro, desde Colombia, pidió “encender la luz cuando las tinieblas llegan” y relacionó los retrocesos democráticos con la crisis climática, la desigualdad y los conflictos bélicos.

El uruguayo Yamandú Orsi hizo foco en el impacto real: “La democracia tiene que aterrizar en cuestiones que los pueblos sientan. Si no, pierde sentido.”

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El mensaje fue claro: sin autocrítica, no hay futuro. “Tenemos que reconocer lo que hicimos mal si queremos frenar el avance de los extremos”, sostuvo Orsi.

Durante el encuentro también se anunció que México, Honduras, Reino Unido, Canadá, Dinamarca, Sudáfrica y Australia se sumarán al grupo, que volverá a reunirse en septiembre en Nueva York, durante la Asamblea General de Naciones Unidas.

“Acá está naciendo algo grande”, aseguró Boric. El objetivo: construir una red internacional que promueva el multilateralismo, defienda las libertades y combata la desinformación con políticas públicas.

El tono del encuentro no pasó desapercibido. Desde las oposiciones de los cinco países hubo críticas al momento elegido y a la situación interna de algunos participantes, en especial Sánchez y Petro.

Aun así, los mandatarios insistieron en que el peligro es real y el tiempo, limitado. “La democracia está bajo ataque. No podemos esperar a que sea tarde”, concluyó Boric.