

Las cámaras los captaron sin filtro: José Alperovich y Marianela Mirra reaparecieron en Puerto Madero, tras meses de separación y en medio del escándalo judicial. Las imágenes, emitidas por el programa A la tarde en América TV, muestran al exgobernador tucumano en su balcón, fumando, lo que contradice las versiones sobre su delicado estado de salud.


“Hay convivencia con Marianela Mirra, una relación de cerca de dos décadas que se había interrumpido el 12 de mayo”, confirmó el periodista Luis Bremer. Esa fecha marcó el final de una historia cargada de silencios, tensión mediática y un fallo judicial que condenó a Alperovich a 16 años de prisión por abuso sexual. Hoy cumple arresto domiciliario.
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Desde un móvil en vivo, Oliver Quiroz aportó otra postal: “Hace una vida muy normal, no se esconde. Muchos vecinos nos contaron que la vieron”. La presencia de Mirra no pasó desapercibida, y las versiones sobre una reconciliación empezaron a circular.
Pero detrás de esta nueva aparición se esconde una historia más profunda. “La primera es que él le dijo que no viviría con ella si lo liberan y ella se enojó mucho”, contó la periodista Pía Shaw en A la Barbarossa. Además, mencionó que Mirra habría interpretado esa distancia como una estrategia para que los medios dejen de buscarlo si sale en libertad.
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La bomba la soltó Silvia de las Cruces, periodista de La Gaceta de Tucumán, quien tuvo contacto directo con Mirra. “Pasaron de hablar de matrimonio a desconfianza”, reveló. Y fue más lejos: “En el caso de que le dieran la prisión domiciliaria, él volvería a la casa familiar con sus hijos y su esposa. Lo que dice Marianela es que 'se sintió descartable'”.
Puerto Madero fue testigo de un reencuentro inesperado. Pero también del dolor, la decepción y un vínculo que, aunque se resista a morir, ya no es el mismo.
Fuente: Primicias Ya

















