Actualizan los impuestos a los combustibles y postergan el resto del aumento para septiembre

El Poder Ejecutivo oficializó este jueves una actualización de los impuestos sobre los combustibles líquidos y el dióxido de carbono, que comenzará a regir en todo el país a partir del 1° de agosto. La medida, instrumentada mediante el Decreto 522/2025, generará un incremento moderado en el precio final del litro de nafta y gasoil, aunque el ajuste completo fue postergado hasta septiembre.

Según lo dispuesto, el nuevo esquema eleva los tributos aplicables a cada litro de combustible, aunque el impacto promedio en surtidores se estima en torno al 1%, sujeto a variaciones según zona y petrolera. “El incremento total pendiente se aplicará desde el 1° de septiembre de 2025”, precisó el texto publicado en el Boletín Oficial.

En el caso de las naftas sin plomo y nafta virgen, el impuesto a los combustibles líquidos pasará a ser de $6,954 por litro, mientras que el tributo al dióxido de carbono se ubicará en $0,426. Ambos valores reflejan una suba frente a los niveles registrados en julio, que eran de $6,620 y $0,405 respectivamente.

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Para el gasoil, el nuevo esquema contempla un impuesto general de $5,615 por litro, además de $0,640 en concepto de dióxido de carbono y $3,040 de diferencial para regiones específicas como la Patagonia, La Pampa y el sur de Mendoza. Estos montos también reflejan aumentos con respecto al mes anterior.

La decisión forma parte del esquema de ajustes escalonados que el Gobierno aplica desde comienzos del año, buscando reducir el efecto directo sobre la inflación. La administración de Javier Milei viene alternando actualizaciones parciales para evitar fuertes subas mensuales en los surtidores.

El decreto aclara que el resto del ajuste acumulado correspondiente a los trimestres de 2024 y al primero de 2025 se aplicará en forma íntegra recién a partir del 1° de septiembre. Esto abarca a todos los tipos de nafta y gasoil, en una estrategia que apunta a dilatar el impacto fiscal de los aumentos pendientes.

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En las provincias de la Patagonia y zonas específicas del sur, el esquema contempla un tratamiento diferenciado para el gasoil, que mantiene subsidios o reducciones impositivas que moderan el impacto sobre los consumidores locales. Estos diferenciales seguirán vigentes pese al aumento.

Fuente: NA.