Las lluvias reactivan al campo: trigo y cebada mejoran y el maíz arranca con expectativas récord
Actualidad26/08/2025
Sergio Bustos
Las cosechas mejorarían.
El clima cambió el pulso de la campaña agrícola. Las lluvias de los últimos días recargaron perfiles y dieron aire a trigo, cebada y girasol, que mostraban signos de estrés hídrico.
La Bolsa de Cereales de Buenos Aires destacó que el fenómeno alcanzó desde el NEA hasta el sudeste bonaerense. Los acumulados favorecieron los cultivos de invierno, aunque en algunas zonas hubo demoras por excesos de agua que complicaron la entrada de maquinaria.
El trigo fue el gran beneficiado. Los perfiles muestran una mejora notable en la disponibilidad de agua en plena etapa de refertilización. El 97,3% de los lotes está en condición de normal a excelente, con el 86,7% en etapas iniciales de emergencia a macollaje.
La cebada concluyó la siembra nacional y el 98% de los lotes se evalúa en condición normal a excelente. El 60% ya se encuentra en macollaje. La contracara son los encharcamientos en el centro bonaerense, que retrasan la fertilización en algunos campos.
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El girasol, otro cultivo de invierno, también se vio favorecido. Las precipitaciones aseguran un arranque más estable para las siembras en el norte y centro del país, con perfiles hídricos que se acercan a su capacidad óptima.
En paralelo, la cosecha de maíz 24/25 alcanzó el 95,9% del área, aunque con demoras. Los lotes tardíos del sur siguen pendientes y la saturación de suelos obliga a esperar. Aun así, la producción proyectada se mantiene en 49 millones de toneladas, dato que confirma un ciclo robusto después de años golpeados por la sequía.
Todas las miradas, sin embargo, ya están en el maíz temprano 25/26. La Bolsa de Comercio de Rosario subrayó que la región núcleo inicia la siembra en las próximas semanas con el mejor escenario en cinco años. “Los productores apuntan a superar los 120 quintales por hectárea”, destacaron técnicos de la entidad.
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Las napas recuperadas, los perfiles cargados y las perspectivas climáticas estables ofrecen condiciones inmejorables. El promedio esperado supera los 100 quintales por hectárea, lo que consolida al maíz como protagonista de la campaña gruesa.
La semana será seca y permitirá acelerar las labores, con lluvias aisladas hacia el viernes. Este contexto asegura que la siembra temprana arranque desde una posición privilegiada.
En síntesis, el panorama agrícola combina un cierre sólido para la campaña de maíz 24/25 con un inicio prometedor para la 25/26. Trigo, cebada y girasol consolidan rindes altos, mientras el maíz temprano promete posicionar a la región núcleo como motor de la producción nacional.
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