

Un gigante de acero y concreto domina los acantilados del suroeste de China. El puente del Gran Cañón de Huajiang se prepara para abrirse al tránsito y ya es el más alto del mundo, con su calzada suspendida a 625 metros, más del doble de la Torre Eiffel.



La obra no solo sorprende por su altura. Las pruebas de carga confirmaron que la estructura resiste más de 3.300 toneladas sin alterar su solidez. Durante cinco días, 96 camiones pusieron a prueba la resistencia del coloso en distintas condiciones de circulación.
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Los sensores distribuidos en todo el tablero registraron vibraciones, tensiones y deformaciones. Cada resultado superó las expectativas de los ingenieros, que ahora se enfocan en la apertura prevista entre septiembre y octubre.
El puente tiene una extensión total de 2.890 metros y un vano principal de 1.420. Su torre más alta alcanza 332 metros y lo ubica también entre los colgantes más largos del planeta. Un hito que lo convierte en referente de la ingeniería civil contemporánea.

Pero su impacto excede la técnica. La ruta que antes demandaba cinco horas entre Liuzhi y Xifeng ahora se hará en apenas una. Y el cruce del cañón, que duraba una hora, se reducirá a solo 90 segundos de viaje panorámico.
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El ritmo de la construcción sorprende aún más. Iniciado en 2022, el proyecto estuvo listo en apenas tres años. El profesor Mamdouh El-Badry, de la Universidad de Calgary, aseguró que “en otras partes del mundo, una obra de esta envergadura lleva al menos una década”.
Además de conectar territorios, el puente ofrecerá experiencias turísticas. La pasarela de cristal y las actividades de puenting y parapente lo convertirán en un imán para visitantes. Manejar o caminar sobre las nubes será parte de la propuesta.
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Según el Libro Guinness de los Récords, el título se mide por la distancia de la calzada al suelo. El Huajiang superará al Puente Beipanjiang (Duge), que ostentaba la marca con 565,4 metros. En cambio, el récord de pilones más altos lo mantiene el Viaducto de Millau, en Francia, con 336 metros.
El gigante chino no es solo una vía de comunicación, es un nuevo símbolo de altura y velocidad, capaz de cambiar la vida en la provincia de Guizhou y de conquistar la mirada del mundo.
Fuente: Newsweek, IFL Science y Libro Guinness de los Récords.


















