El auto fue secuestrado.
Puerto Madryn vivió este martes un operativo policial que destapó otra maniobra ilegal en el mercado de autos de alta gama. Un Audi Q3, valuado en 50 mil dólares, fue interceptado en la calle Lombardo por personal de la División Sustracción de Automotores.
El control, que parecía rutinario, se transformó en un hallazgo clave. Los efectivos solicitaron la documentación del vehículo y advirtieron que algo no cuadraba. La cédula verde que presentó el conductor era falsa y no tenía medidas de seguridad oficiales.
Ante la sospecha, los policías procedieron a verificar el rodado en detalle. Allí constataron adulteraciones en la numeración del chasis y también en el motor, lo que constituye un delito según el artículo 289 del Código Penal.
“El rodado presentaba adulteración en chasis y motor, con numeraciones modificadas”, confirmaron fuentes del caso. El descubrimiento activó la intervención inmediata del Ministerio Público Fiscal.
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El conductor, que no pudo justificar la procedencia del vehículo, quedó imputado por adulteración de instrumento público, encubrimiento y falsificación de documento, delitos previstos en los artículos 289 y 292 del Código Penal argentino.
El Audi Q3 fue secuestrado y trasladado a dependencias policiales para continuar con las pericias. El valor comercial del rodado ronda los 50 mil dólares, lo que evidencia el atractivo de este tipo de operaciones ilegales.
En Argentina, la adulteración de chasis y motor es una práctica extendida que busca dar “legalidad” a autos robados o con papeles truchos. Los delincuentes utilizan estas maniobras para encubrir el origen ilícito y volverlos aptos para circular o ser revendidos.
Más allá del delito, este tipo de rodados representan un peligro para quienes transitan en la vía pública. La adulteración dificulta su trazabilidad y facilita que los vehículos se usen en otros ilícitos, desde estafas hasta traslados vinculados con el narcotráfico.
Los investigadores señalaron que muchas veces estos autos ingresan al mercado negro a través de maniobras fraudulentas con documentación apócrifa. “No solo afectan la seguridad vial, también generan un perjuicio económico y legal para eventuales compradores que pueden ser víctimas de estafa”, remarcaron.
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El operativo de este martes refuerza la importancia de los controles. La División Sustracción de Automotores trabaja junto al Ministerio Público Fiscal en la detección de este tipo de delitos, que requieren pericias técnicas y coordinación entre distintas áreas.
El uso de tecnología resulta fundamental en cada inspección. Lámparas ultravioletas, bases de datos oficiales y peritos especializados permiten descubrir irregularidades que a simple vista no se notan.
“Cada operativo es vital para impedir que estos autos circulen en la ciudad”, resaltaron desde la fuerza policial. El mensaje apunta a desalentar la compra de vehículos que ofrecen precios tentadores sin respaldo legal.
La causa judicial ahora sigue su curso. El Ministerio Público Fiscal ordenó el secuestro definitivo del Audi y trabaja en la trazabilidad de sus piezas y papeles. No se descarta que el caso derive en la detección de una red más amplia de comercialización ilegal.
El hecho se suma a una serie de operativos realizados en la provincia que buscan frenar el avance del mercado negro automotor. Con cada hallazgo, las autoridades remarcan que la única forma de cortar estas maniobras es con controles firmes y denuncias inmediatas.
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