Weretilneck habló de Pesatti tras semanas de silencio y tensiones en Río Negro

El gobernador de Río Negro, Alberto Weretilneck, se refirió por primera vez a Pedro Pesatti luego de la crisis política que se desató por la definición de candidaturas al Senado. La decisión de respaldar a Facundo López y no al vicegobernador como aspirante a la banca nacional dejó heridas abiertas dentro del oficialismo provincial.

El breve contacto con la prensa se dio esta mañana en el Salón Gris de Casa de Gobierno, donde el mandatario encabezó un acto oficial. A su lado estuvo López, que en plena campaña se muestra como su principal socio político y candidato de confianza.

La consulta de FM De la Costa lo obligó a pronunciarse sobre un tema que evitaba desde hace semanas. “Todavía no hemos hablado”, reconoció Weretilneck al ser interrogado por su relación con Pesatti. La sinceridad expuso que la distancia persiste y que aún no hubo un acercamiento para ordenar la interna.

El gobernador buscó atenuar el impacto de la frase y añadió: “Ya vamos a tener momento para conversar”. Acto seguido, destacó la presencia de López y del legislador Juampi Muena en las últimas actividades oficiales, como una manera de remarcar con quiénes viene compartiendo la gestión y la campaña.

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La situación refleja un quiebre silencioso en la cúpula provincial. Pesatti, histórico compañero de Weretilneck, quedó relegado tras la decisión de apostar por López. El gesto no solo lo dejó sin candidatura, sino que puso en duda su peso dentro del esquema político de Juntos Somos Río Negro.

El silencio del vicegobernador alimenta las especulaciones. Mientras algunos sostienen que prepara una estrategia para diferenciarse, otros creen que mantendrá un bajo perfil para evitar un choque mayor. Por ahora, no hubo declaraciones públicas que aclaren su postura.

La campaña hacia el Senado se desarrolla con López al frente y con un Weretilneck que apuesta a mostrar unidad hacia afuera. Sin embargo, las tensiones internas amenazan con profundizarse si no se produce pronto un diálogo que reordene la relación con su vice.

La política rionegrina observa con atención. La fractura, aún latente, puede condicionar no solo la campaña nacional sino también la estabilidad del oficialismo dentro de la provincia. La incógnita sigue siendo cuándo y cómo se dará la conversación pendiente entre Weretilneck y Pesatti.