
Venezuela denunció hostigamiento de un buque estadounidense en aguas del Caribe
Actualidad14/09/2025
REDACCIÓN
La tensión diplomática entre Caracas y Washington sumó un nuevo capítulo este sábado. El Gobierno de Venezuela denunció que un destructor estadounidense interceptó de manera hostil al buque pesquero Carmen Rosa, donde viajaban nueve pescadores dedicados a la captura de atún.


Según la información oficial, el incidente ocurrió a 48 millas náuticas al noreste de la isla La Blanquilla, dentro de la Zona Económica Exclusiva de Venezuela. “El buque venezolano fue asaltado de manera ilegal por el USS Jason Dunham (DDG-109), tripulado por marines y equipado con misiles”, señaló un comunicado difundido por el canciller Yván Gil.
OTRAS NOTICIAS:
En conferencia de prensa, el ministro explicó que 18 efectivos armados subieron al barco pesquero y mantuvieron retenida a la tripulación por varias horas. El funcionario calificó el hecho como una provocación destinada a “justificar una escalada bélica en el Caribe e insistir en un cambio de régimen”.
La Fuerza Armada Nacional Bolivariana intervino en el operativo y acompañó al Carmen Rosa hasta su regreso a puerto. “Nuestra FANB actuó con firmeza para garantizar la integridad de los pescadores y registró cada detalle del hostigamiento”, precisó Gil ante los medios.
OTRAS NOTICIAS:
El gobierno venezolano reclamó a Estados Unidos que detenga “de inmediato” este tipo de maniobras. “Se trata de acciones que ponen en riesgo la paz y la seguridad en la región”, agregó el canciller al reiterar la posición de Caracas en defensa de su soberanía.
La denuncia fue transmitida también a través de los canales diplomáticos, con la intención de involucrar a organismos internacionales y sumar respaldo de países aliados. “Ratificamos nuestro compromiso por la paz, y no aceptaremos violaciones a nuestro espacio marítimo”, remarcó el comunicado oficial.
OTRAS NOTICIAS:
El episodio generó preocupación en los pescadores locales, que desde hace años denuncian presiones de barcos extranjeros en aguas caribeñas. Organizaciones sociales alertaron que este tipo de hechos impacta directamente en la economía de comunidades que dependen de la actividad pesquera.

















