LOS DELFINES TOMAN EL PROTAGONISMO DEL VERANO EN CHUBUT

El Golfo Nuevo se convierte en escenario principal para el estudio y cuidado de los delfines durante la temporada estival. Investigadores del CENPAT invitan a la comunidad a sumarse al monitoreo de estas fascinantes especies marinas.

En diálogo con #LA17, Mariana Degrati, del Laboratorio de Mamíferos Marinos del CENPAT, destaca que el verano es el mejor momento para observar delfines. “Los grupos más grandes se forman cerca de la costa en esta época”, explica. La presencia masiva de navegantes favorece los registros.

El proyecto “Súmate al monitoreo de delfines” busca integrar a ciudadanos interesados ​​en la conservación marina. “Cualquiera con una embarcación puede participar registrando avistamientos de delfines”, asegura Degrati. Los datos serán centralizados en una plataforma digital.

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Épico LED es la aplicación que facilita el registro de avistamientos en tiempo real. “Podés anotar el tipo de delfín, cantidad y ubicación en pocos pasos”, menciona la investigadora. La herramienta está diseñada para ser intuitiva y accesible.

El Golfo Nuevo alberga más de 2.000 delfines, con vistas que pueden incluir grupos de hasta 200 individuos. “Tenemos principalmente delfines oscuros y comunes”, señala Degrati. Estas especies pasan su vida completa en los golfos patagónicos.

El proyecto también monitorea la actividad náutica para evitar impactos en los delfines. “Queremos saber cuántas embarcaciones se acercan a los grupos”, explica la investigadora. La educación es clave para lograr una convivencia responsable.

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Los delfines cumplen todo su ciclo vital en el Golfo Nuevo, desde la alimentación hasta la reproducción. “La gestación dura 11 meses y la lactancia un año”, detalla Degrati. La conservación de este entorno es fundamental para su supervivencia.

Entre los depredadores naturales de los delfines, las orcas ocupan el primer lugar. “Es un equilibrio natural que debemos respetar”, comenta la especialista. Sin embargo, el mayor riesgo sigue siendo la actividad humana irresponsable.

La interacción humana debe realizarse a una distancia mínima de 100 metros. “Nunca hay que acercarse a un grupo que esté alimentándose”, advierte Degrati. Estas medidas buscan proteger tanto a los animales como a las personas.

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Los datos recolectados por los ciudadanos fortalecerán la base científica existente. “Llevamos 20 años estudiando delfines, pero ahora necesitamos más colaboración”, explica la investigadora. La comunidad tiene un rol clave en esta tarea.

El proyecto incluye la distribución de códigos QR en puertos y clubes náuticos. “Así los navegantes pueden descargar la app y participar fácilmente”, señala Degrati. La Prefectura y el Club Náutico apoyan activamente esta iniciativa.

Además de observar delfines, el proyecto busca generar conciencia sobre el cuidado del mar. “Queremos que todos disfruten del mar sin perjudicar su biodiversidad”, afirma. El equilibrio entre turismo y conservación es uno de los objetivos principales.

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Los talleres educativos son parte de la estrategia para promover el respeto por la fauna marina. “Es importante enseñar cómo interactuar sin causar daño”, dice la investigadora. La capacitación es esencial para mantener la armonía en el Golfo.

El equipo del CENPAT destaca que los delfines son indicadores de la salud del ecosistema. “Si cuidamos a los delfines, cuidamos todo el Golfo”, asegura Degrati. La conservación beneficia a la comunidad ya futuras generaciones.

Este verano, el Golfo Nuevo no solo es un destino turístico, sino también un laboratorio natural. “Invitamos a todos a participar y disfrutar de esta experiencia única”, concluye Degrati. La ciencia ciudadana es una herramienta poderosa para la protección marina.