Avanza la exploración del proyecto Amarillo Grande en Río Negro: un paso clave hacia el uranio

Actualidad29/09/2025REDACCIÓNREDACCIÓN
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Avanza el proyecto de uranio Amarillo Grande en Río Negro con un programa de exploración y análisis.

El proyecto Amarillo Grande, ubicado en la provincia de Río Negro, sigue dando pasos firmes hacia su desarrollo. Ivana Minerales SA (IMSA), una sociedad entre la canadiense Blue Sky Uranium y la firma argentina Corporación América Group de Eduardo Eurnekian, dio inicio al primer programa de exploración en la zona, con la mirada puesta en finalizar un estudio de prefactibilidad (PFS) para el yacimiento Ivana.

Este programa tiene como objetivo delinear nuevas áreas de perforación, particularmente al norte de Ivana, mediante el uso de una tecnología avanzada de tomografía eléctrica polo-dipolo. El área de estudio, conocida como Ivana Gap, es clave para identificar nuevas zonas con potencial de recursos minerales, lo que podría ampliar considerablemente el alcance del proyecto.

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El presidente de Blue Sky Uranium, Nikolaos Cacos, destacó la importancia de estos estudios: “Estos programas complementarios ayudan a avanzar en la exploración de alta calidad en el proyecto Amarillo Grande, con Ivana como potencial productor inicial y centro de procesamiento”. Las expectativas de la empresa están puestas en expandir los recursos de uranio de la región, que podrían abastecer a mercados internacionales y fomentar el desarrollo económico local.

Hitos importantes hacia la prefactibilidad

A la par del programa de exploración, IMSA ha completado con éxito el programa de perforación de relleno en el Depósito Ivana, que marca un avance significativo hacia la fase de prefactibilidad. En total, se perforaron 4.959 metros en 328 pozos, lo que eleva el total de perforación en el depósito a 15.839 metros en 1.166 pozos. Este trabajo permitirá actualizar y mejorar las categorías de recursos minerales actualmente estimadas en un 80% como recursos indicados.

La etapa de perforación y exploración busca asegurar que el yacimiento Ivana pueda ofrecer una base sólida para la futura explotación del uranio. Con el análisis de los datos obtenidos, el objetivo es optimizar los cálculos de recursos y mejorar la viabilidad del proyecto.

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Simultáneamente, IMSA ha iniciado un análisis de brechas para avanzar en la transición de Ivana de un activo de exploración a un proyecto de desarrollo. Este análisis, que se prevé tome entre cuatro y seis semanas, tiene como fin identificar todos los estudios adicionales, trabajos de ingeniería y permisos necesarios para respaldar tanto el estudio de prefactibilidad como el futuro estudio de factibilidad definitiva (EFD).

El análisis de brechas también ayudará a detallar la secuencia de tareas y plazos para el proyecto, estableciendo una hoja de ruta clara hacia su construcción y operación futura. Además, se proporcionará un marco inicial para estimar los costos de capital y operativos, lo que será esencial para la planificación financiera y la atracción de inversores.

Fuente: MyD

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