Una startup argentina cautivó a la NASA con un simulador que recrea la vida en la Luna y Marte

Un equipo argentino se metió en la órbita de la NASA. La startup Wizor fue distinguida en el NASA International Space Apps Challenge 2025, el hackatón científico más grande del planeta, que convoca durante 48 horas a miles de mentes creativas de distintos países. Su propuesta, bautizada Wizor Space, permite ponerse al mando de una base en la Luna o Marte y tomar decisiones que afectan la vida de toda la tripulación.

El proyecto se gestó durante la edición local del concurso, realizada en octubre en Buenos Aires con apoyo de la CONAE. El simulador combina datos ambientales reales de la NASA con un entorno interactivo y dinámico, y busca demostrar que, en misiones espaciales, el bienestar humano puede ser tan importante como la tecnología. Cada variable cuenta: desde la temperatura y la presión del aire hasta la iluminación o los niveles de radiación.

“Estoy muy contento por todo lo que aprendimos y por la validación del jurado, que entendió nuestra visión para el éxito de las misiones en la Luna y Marte”, contó Martín Méndez, CEO y fundador de Wizor. Según explicó, el desafío nació del reto “Your Home in Space”, del propio Space Apps Challenge, que invitaba a diseñar hábitats autosuficientes para futuras colonias humanas fuera de la Tierra.

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La meta fue ir más allá de un diseño arquitectónico y crear un ecosistema autosuficiente. En Wizor Space, los usuarios deben administrar la energía, la comida, el descanso y la salud emocional de los astronautas. Las decisiones pequeñas pueden tener consecuencias enormes: una mala regulación de la luz o del sonido puede alterar el ánimo del equipo y reducir la productividad en un entorno donde el error no tiene margen.

“El desafío fue triple: identificar los datos, procesarlos y simular el tiempo real”, detalló Méndez. Los datos que usa el simulador provienen de misiones de rovers y orbitadores. Para lograr la experiencia inmersiva, el equipo debió traducir información científica compleja —como niveles de radiación o composición del suelo— en variables que pudieran verse y manipularse dentro del entorno virtual.

Priscila Regalini, cofundadora y directora de Wizor, explicó que el objetivo fue equilibrar la salud física y mental de los tripulantes. “Medimos la salud física a través del gasto metabólico y la mental mediante parámetros sensoriales del ambiente”, contó. El sistema analiza cinco variables esenciales: luz, temperatura de color, sonido, vistas virtuales y clima del módulo. Así, el usuario puede ajustar el entorno para mejorar el bienestar en zonas de trabajo, descanso u ocio.

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Martín Olivera, cofundador y Chief People Officer de la startup, agregó que la herramienta se diseñó bajo los principios de ingeniería ambiental y psicología espacial. Y destacó que no solo sirve para el espacio: “Wizor Space también puede aplicarse en entornos terrestres extremos, como estaciones antárticas, submarinos, plataformas petroleras o incluso oficinas sin ventanas”. El mismo modelo de control ambiental permite reducir el estrés y aumentar la productividad en lugares aislados o de alta presión.

La iniciativa se alinea con la visión de la NASA de crear soluciones con impacto científico y social. En cada edición del Space Apps Challenge surgen proyectos que luego se convierten en herramientas educativas, startups tecnológicas o experiencias de entrenamiento. En 2025 participaron equipos de toda la Argentina, desde Bahía Blanca y Rosario hasta San Juan y Comodoro Rivadavia, todos con propuestas basadas en ciencia y creatividad.

Wizor, que forma parte del ecosistema de innovación +54lab del Parque de Innovación de Buenos Aires, ya trabaja en alianzas con la NASA y la CONAE. “Nos ofrecimos como posible solución para evaluar las condiciones de los tripulantes en el espacio, y fuimos invitados a participar de sus programas”, adelantó Méndez. El vínculo con Houston y el Kennedy Space Center ya está en marcha, y el equipo espera formalizar su ingreso como proveedor dentro del ecosistema de la agencia.

Con esta nominación, Wizor pone a la innovación argentina en la órbita global. Su proyecto combina ciencia, diseño y bienestar humano en un mismo entorno digital. Y lo hace con una premisa tan simple como poderosa: para vivir fuera de la Tierra, primero hay que entender cómo cuidar la vida dentro de ella.