Jóvenes reescriben el trabajo: menos dependencia, más autonomía y nuevas reglas

Actualidad27/11/2025Sergio BustosSergio Bustos
El Municipio visitó la Cooperativa de Trabajo Lanera Trelew Ltda_jfif
Jovenes trabajadores más independientes.

El mercado laboral cambia y la generación joven lo siente en carne propia. El estudio “Jóvenes y Trabajo: Realidad, Expectativas y Desafíos en un Contexto de Incertidumbre” revela que el clima político y económico no achica su ánimo. El 76% confía en que conseguirá el trabajo que desea, incluso con salarios bajos, informalidad creciente y exigencias de experiencia que no siempre pueden cumplir.

Ese optimismo convive con una ruptura cultural profunda. La relación de dependencia pierde terreno entre los más jóvenes. Apenas un 16% trabaja en blanco en el sector privado y un 9% en el público. El 37% ya trabaja de forma independiente, cifra que se dispara entre quienes tienen menor nivel educativo. La libertad de horarios y la posibilidad de autogestionarse pesan más que la estabilidad tradicional.

La encuesta también muestra una sintonía particular con el discurso oficial. “Apoyan la flexibilización porque la sienten más cercana a su manera de vivir y trabajar”, afirma Florencia Filadoro, directora de la consultora. Según la investigación, los jóvenes valoran esquemas formales pero flexibles, con foco en objetivos más que en fichar horas.


OTRAS NOTICIAS

temporal san antonioRáfagas y lluvia dañan arbolado y postes en San Antonio Oeste

Esa preferencia aparece en datos contundentes: el 77% busca jornadas de 6 a 8 horas y elige modalidades que permitan capacitarse o disponer de tiempo libre. El modelo clásico de oficina ya no seduce. La prioridad pasa por equilibrar trabajo, estudio y vida personal.

El informe también detecta una ausencia de reclamos colectivos. En vez de cuestionar el sistema, los jóvenes diseñan estrategias individuales. “Buscan su propia manera de salir adelante”, resume Filadoro. Emprender, estudiar, usar inteligencia artificial o apoyarse en plataformas digitales forman parte de ese camino, aunque la precariedad esté a la vista.

La paradoja es evidente: sienten más oportunidades profesionales que sus padres, pero no así mejores condiciones económicas. El 69% cree que crecerá laboralmente, aunque solo el 49% dice que vive mejor que la generación anterior. La desigualdad intergeneracional se asume, pero no detiene su impulso.

Las diferencias de género también definen este mapa. Entre las mujeres crece el valor de la educación: el 41% cree que es la vía para progresar, frente al 25% de los hombres, que priorizan emprender. Aun así, ambos coinciden en algo incómodo: los contactos siguen siendo determinantes para entrar al empleo formal.


OTRAS NOTICIAS

Compra de dólaresEl dólar oficial encadenó cinco subas y quedó a menos de 4% del techo de la banda cambiaria

La inteligencia artificial deja otra señal de época. El 75% no teme ser reemplazado. La ven como un refuerzo, no como un riesgo, aunque entre las mujeres la preocupación es mayor.

El panorama se completa con una idea que atraviesa todo el informe: la vida importa más que el trabajo. Los proyectos personales avanzan a otro ritmo. Comprar una vivienda escala posiciones entre las mujeres, mientras los varones sueñan con “ganar mucha plata” o montar su propia empresa.

Los jóvenes navegan entre esperanza y resignación. Se adaptan, prueban, cambian de rumbo. La relación de dependencia, símbolo del siglo XX, cede ante un modelo que privilegia libertad y flexibilidad. Y aunque las reglas del juego sigan moviéndose, esta generación encuentra su lugar sin esperar permisos.

Te puede interesar

Suscribite al newsletter de #LA17