Cerro Dragón abre una nueva era energética con resultados positivos en shale gas

Las operaciones en la cuenca del Golfo San Jorge alcanzaron un punto de giro significativo durante los primeros días de diciembre. La operadora Pan American Energy (PAE) inició las pruebas de producción, conocidas técnicamente como flowback, en su segundo pozo de shale gas dentro del yacimiento Cerro Dragón. Estos trabajos forman parte de un plan piloto que busca determinar la viabilidad de extraer recursos no convencionales en una zona históricamente vinculada a la producción tradicional.

Los datos obtenidos en las primeras 72 horas de evaluación arrojaron cifras que generan optimismo en el sector hidrocarburífero regional. Los caudales iniciales de gas se ubicaron entre 1 y 2 millones de pies cúbicos por día por pozo, un rendimiento que duplica las proyecciones más conservadoras que manejaba la empresa. Este volumen de fluido indica que la formación geológica denominada D-129 posee una capacidad de respuesta técnica superior a lo esperado por los especialistas.

El proceso requiere una complejidad técnica superior a la del gas convencional, ya que el recurso permanece atrapado en rocas de baja permeabilidad. Para liberar estas moléculas, la compañía realizó perforaciones con ramas laterales de 3.000 metros de longitud y aplicó 25 etapas de fractura hidráulica. Este método permite crear canales artificiales para que el gas fluya hacia la superficie, utilizando presiones que superan los 600 bares mediante la inyección de agua y arena.

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Marcos Bulgheroni, CEO de la firma, manifestó su satisfacción con los avances registrados en el yacimiento chubutense durante las últimas semanas. El directivo remarcó que el equipo técnico consiguió interpretar variables fundamentales como la presión y el contenido orgánico de la roca madre. Según sus palabras, “Logramos entender la presión, el contenido orgánico y las características del shale. Esto es el primer paso hacia algo mucho más grande”.

La estrategia de la empresa apunta a integrar estos nuevos pozos con la infraestructura ya existente en la cuenca del Golfo San Jorge. Actualmente, conviven las técnicas de recuperación secundaria en pozos maduros con la exploración de fronteras no convencionales. Sobre esta visión a largo plazo, el ejecutivo sostuvo: “Desde hace 70 años invertimos en forma sostenida en el Golfo San Jorge y nuestro trabajo permitió convertir a Cerro Dragón en la mayor área productora de hidrocarburos convencionales del país”.

La calidad del producto obtenido representa otra ventaja competitiva para la provincia, ya que se trata de un gas seco con una pureza de metano superior al 90%. Esta característica facilita su inserción inmediata en los gasoductos locales o su potencial procesamiento para la exportación. “Hoy somos los primeros en explorar la cuenca con objetivo shale y estamos confiados en poder desarrollarlo”, aseguró Bulgheroni respecto a la posición de vanguardia que tomó la operadora.

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Por su parte, el gobernador Ignacio Torres analizó el impacto que estos resultados preliminares tienen para las arcas públicas y la actividad económica provincial. El mandatario destacó que este proyecto de inversión, que ronda los 250 millones de dólares, aleja el fantasma del agotamiento de los recursos en la zona sur. Al respecto, el titular del ejecutivo afirmó: “Las pruebas de diciembre confirman que Cerro Dragón no está en declino y que puede ser el inicio de una nueva era shale en el sur”.

En términos de sustentabilidad, el proyecto incorpora tecnología para minimizar el impacto ambiental durante las fases de fractura. La operadora implementó un sistema de reutilización del 70% del agua empleada y técnicas de captación de metano para reducir las emisiones directas. Además, la proximidad de estos pozos a las plantas de inyección de polímeros permite una gestión más eficiente de los recursos energéticos disponibles en el área.

Si la estabilidad de los pozos se mantiene durante las próximas semanas, la fase masiva de explotación comenzará formalmente en 2026. Esta proyección estima un incremento del 15% en la producción total de Chubut, lo que derivaría en una recaudación de 90 millones de dólares adicionales en concepto de regalías durante los próximos cinco años. La consolidación de este polo productivo posiciona a la región como un complemento estratégico para la oferta de gas natural a nivel nacional.