


La receta electrónica se volvió obligatoria a nivel nacional desde agosto. Sin embargo, en Chubut sigue vigente la Ley 1083, que permite el uso de recetas manuscritas. Esta situación genera diferencias en la implementación de la normativa.


Eduardo Molina, presidente del Colegio de Farmacéuticos de Chubut, resaltó los beneficios de las recetas electrónicas en díalogo con #LA17. “Disminuyen errores y facilitan el control de medicamentos”, explicó. En la provincia, este sistema ya es utilizado por obras sociales importantes como PAMI.
La Ley Nacional busca optimizar la interacción entre pacientes, médicos y farmacias. Pero en zonas rurales con escasa conectividad, esta medida es difícil de aplicar. “No podemos exigir recetas electrónicas donde no hay acceso a internet”, advirtió Molina.
OTRAS NOTICIAS:
Las farmacias de Chubut deben aceptar recetas manuscritas, especialmente en áreas sin conexión. El farmacéutico verifica la calidad de la firma y la autenticidad del documento. Esto asegura que los pacientes puedan acceder a sus medicamentos sin restricciones.
Algunos pacientes expresaron confusión con el sistema electrónico. “A veces no saben si deben pedir una caja grande o chica”, comentó Molina. Esta falta de claridad genera problemas en la dispensación de los medicamentos.
El sistema electrónico también tiene complicaciones operativas para las farmacias. “Usamos hasta diez plataformas diferentes según la obra social”, indicó Molina. Esto aumenta la burocracia y los costos asociados al proceso.
OTRAS NOTICIAS:
El gasto en papel por la impresión de recetas electrónicas es otro problema. “Es un gasto innecesario que deberíamos evitar”, afirmó Molina. Propone una plataforma única para simplificar el trabajo y reducir costos.
La implementación nacional ha expuesto problemas de infraestructura y coordinación. En algunas provincias se reportaron casos de hackeo y recetas falsas. Esto genera desconfianza entre farmacéuticos y pacientes.
En Chubut, las recetas electrónicas funcionan bien con obras sociales consolidadas. PAMI, por ejemplo, las utiliza desde hace más de tres años. Este modelo podría extenderse si se soluciona el problema de conectividad.
OTRAS NOTICIAS:
El abuso en la prescripción de medicamentos preocupa a los farmacéuticos. La receta electrónica permite un mayor control sobre este problema. Sin embargo, requiere ajustes para evitar fraudes o errores.
El impacto financiero del sistema afecta directamente a las farmacias. Muchas deben financiar la operación mientras esperan los pagos de las obras sociales. Esto genera tensiones en el sector farmacéutico.
El PAMI también ha reducido beneficios para los jubilados. Algunos medicamentos dejaron de tener descuentos del 100%, lo que afecta a los pacientes. La medida genera críticas en el ámbito sanitario.
OTRAS NOTICIAS:
En zonas alejadas, la receta manuscrita sigue siendo indispensable. Molina destacó que no se puede aplicar la misma solución para todo el país. Un enfoque inclusivo es necesario para atender las realidades locales.
La digitalización es una herramienta prometedora para mejorar la salud pública. Pero su éxito depende de la infraestructura y capacitación adecuadas. La implementación apresurada expone fallas que deben corregirse.
El modelo actual tiene ventajas significativas, pero también desafíos importantes. Su éxito dependerá de la colaboración entre médicos, farmacias y el Estado. Molina confía en que los ajustes permitirán una transición efectiva.
OTRAS NOTICIAS:
“Esperemos que estos cambios sean para bien”, concluyó Molina. El optimismo se mantiene, pero las soluciones deben adaptarse a las necesidades locales. La receta electrónica sigue siendo un paso importante hacia la modernización del sistema de salud.









