


Lo que debía ser una conferencia de prensa habitual, cargada de análisis táctico y declaraciones post partido, se transformó anoche en un instante de emoción genuina. Lionel Scaloni, director técnico de la Selección argentina, no pudo contener las lágrimas tras una pregunta inesperada que llegó desde el corazón.
Fue Nicolás Falcón, periodista uruguayo que padece una discapacidad, quien logró romper el protocolo con una intervención tan sencilla como emotiva. Consultó sobre el futuro de Lionel Messi y su participación en el Mundial de Clubes, pero antes expresó lo que sentía: “Es un honor que esté en Uruguay”, le dijo a Scaloni.
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La frase, cargada de admiración, descolocó al técnico. Visiblemente emocionado, con los ojos vidriosos y la voz contenida, respondió: “Me hacés emocionar y todo, gracias por tus palabras. Tengo más amigos uruguayos que argentinos”, confesó, en un gesto que generó un fuerte aplauso entre los presentes.
Luego, retomó la pregunta con la serenidad que lo caracteriza. Habló de Messi, de su espíritu competitivo, y de su confianza plena en que seguirá rindiendo al máximo nivel: “Es un chico que compite siempre. Más allá de los rivales, va a competir esté donde esté. Después tiene los partidos con su equipo y con la Selección”, explicó.
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El momento trascendió lo futbolístico. Fue un cruce humano, sincero, entre un periodista que ama su trabajo y un entrenador que entiende el valor de cada palabra. La escena, rápidamente viralizada en redes, se convirtió en símbolo de respeto y cercanía, en un contexto donde la rivalidad futbolística muchas veces oscurece los valores compartidos.







