Sin superpoderes Sturzenegger pierde margen legal y Milei queda atado al Congreso

Política30/06/2025Sergio BustosSergio Bustos
Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación y Transformación del Estado
Federico Sturzenegger.

El reloj corre para el Gobierno. El 8 de julio expiran las facultades delegadas que permitieron al Ejecutivo avanzar con reformas por decreto, sin el filtro del Congreso ni de los tribunales.

Federico Sturzenegger, ministro de Desregulación, pierde el paraguas legal que sostuvo su primera etapa. Ya no podrá dictar medidas por vía directa ni emitir normas amparadas en la Ley Bases. Cada paquete deberá ingresar como proyecto o decreto común, con riesgo de judicialización.

En la Casa Rosada admiten el nuevo escenario. “No es una pérdida de poder político, pero sí de herramienta normativa”, explican cerca del ministro. Las decisiones estructurales ya no saldrán desde una oficina, sino que dependerán del termómetro legislativo.

El oficialismo cuenta con solo 72 votos garantizados en Diputados. Muy lejos de los dos tercios necesarios para sostener vetos presidenciales. Esa debilidad deja en jaque posibles rechazos a proyectos que no cuenten con respaldo social o político.

Uno de los primeros test será la nueva fórmula jubilatoria, que propone una recomposición del 7,2% y actualización por inflación. La iniciativa ya avanza en el Senado y podría convertirse en ley sin aval del oficialismo.


OTRAS NOTICIAS

Sesión del Consejo de la Magistratura de ChubutDesignaron nuevos jueces, fiscales y defensores en la Justicia de Chubut

Al mismo tiempo, la Cámara baja no logra destrabar el proyecto de Inocencia Fiscal, frenado por falta de firmas en la comisión de Presupuesto. El impulso inicial perdió fuerza y el oficialismo no logró sumar voluntades.

Frente a este contexto, Sturzenegger trabaja en un nuevo esquema “post-Bases” para canalizar reformas. Evalúa presentar proyectos por sector y activar decretos reglamentarios, aunque todo con un control más estricto y plazos menos ágiles.

El objetivo ahora será mantener activa la agenda sin generar conflicto abierto. Las prioridades incluyen desregulaciones laborales, comercio interior y servicios públicos, pero todas deberán someterse al pulso del Congreso.

Milei queda sin superpoderes y obligado a negociar cada ley. El cambio de etapa también activa tensiones dentro del oficialismo, donde distintos sectores reclaman orden político antes de avanzar con más reformas.

Además, los gobernadores empiezan a marcar distancia. Algunos ya formaron bloques propios, como en la Patagonia, mientras otros negocian de manera individual en busca de recursos para sus provincias.

El plan original de reformas aceleradas por decreto entra en pausa. Sin facultades especiales y sin mayoría legislativa, el Gobierno encara el segundo semestre con menos herramientas y más obstáculos.

Te puede interesar

Suscribite al newsletter de #LA17