

En medio de los preparativos por el 120° aniversario de Esquel, el municipio anunció una propuesta que busca dejar una marca simbólica y duradera. Convocaron a un concurso para crear la bandera oficial de la ciudad, que será elegida por la comunidad y representará su identidad, su historia y sus valores.

La iniciativa fue presentada por Enrique Castro, subsecretario de Cultura, quien explicó que esta acción se enmarca dentro de una serie de eventos conmemorativos que se desplegarán a lo largo de los próximos meses. El objetivo principal es impulsar una reflexión colectiva que se traduzca en un diseño que hable de lo que Esquel fue, es y quiere ser.
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El certamen está dirigido a instituciones educativas y organizaciones comunitarias, tanto con personería jurídica como sin ella. Cada una podrá inscribirse previamente para participar del proceso creativo que culminará con la presentación de una propuesta de bandera.
Una vez confirmada la inscripción, las bases y condiciones serán publicadas oficialmente. Los criterios destacarán la simplicidad del diseño, el uso de hasta tres colores y la incorporación de elementos que reflejen aspectos culturales, geográficos e históricos propios de Esquel.
“Queremos una bandera que represente verdaderamente a la ciudad, con símbolos que la gente reconozca como propios”, remarcó Castro al presentar la iniciativa. La comunidad jugará un rol activo en la elección, fortaleciendo el sentido de pertenencia local.
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Desde el área de Cultura adelantaron que pronto se difundirá un flyer con toda la información necesaria para participar. Esta campaña servirá para ampliar la convocatoria y garantizar una amplia participación en todo el territorio esquelense.
La propuesta ganadora será elevada al Concejo Deliberante para su tratamiento como ordenanza. El plan contempla que la bandera se adopte de forma oficial antes de que se celebren los actos centrales por el aniversario número 120.
La ciudad, situada en plena cordillera chubutense, no cuenta con un símbolo de este tipo, por lo que el proyecto apunta a consolidar una representación visual permanente que trascienda generaciones. El diseño elegido será, además, un emblema presente en eventos, instituciones y actividades culturales.
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Este paso marca una instancia significativa en el fortalecimiento del vínculo entre la ciudadanía y su identidad colectiva. La bandera, como símbolo, permitirá sintetizar los elementos que dan sentido a Esquel y su historia en un lienzo cargado de significado.
La convocatoria ya generó entusiasmo en distintas escuelas y agrupaciones culturales, que ven en esta iniciativa una oportunidad para reflexionar y aportar su mirada sobre la ciudad. El proceso también busca impulsar instancias de diálogo entre generaciones.









