
Angelici mueve los hilos en CABA pero la interna PRO ya le marca la cancha
Política21/07/2025
Sergio Bustos
Jorge Macri no cena solo. Cada encuentro político en su departamento sobre avenida Del Libertador tiene un invitado infaltable: Daniel “el Tano” Angelici, el nuevo operador de poder en la Ciudad. Ya maneja la Legislatura y digita acuerdos. Lo habilitó el propio Mauricio.


El Tano no es sólo un viejo amigo del expresidente. También es el nexo obligado entre los primos, que se hablan poco, se critican en voz baja y se culpan mutuamente por la derrota porteña ante Adorni.
En una de esas cenas, Jorge Macri mostró estudios cualitativos que explican el traspié electoral. Vecinos que votaron PRO en 2023 migraron por broncas bien concretas: basura, tránsito, inseguridad.
Fue un gesto indirecto hacia Darío “Daro” Nieto, jefe del bloque PRO, que había apuntado a la gestión como responsable del fracaso. Ese día Macri lo cruzó. Después no se hablaron más.
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En esas veladas también hay humor ácido. Uno de los blancos frecuentes es Pablo Bereciartúa, ministro de Movilidad. “Llega, graba dos videos y se va”, dicen entre risas. Su salida ya suena en los pasillos.
Ezequiel Sabor, flamante secretario de Gobierno, entró para apagar incendios. Reemplaza en los hechos a César “el Tuta” Torres, un operador que dejó tierra arrasada con los comuneros. Sabor recupera funciones y caja.
El PRO también sufre dentro del recinto. La oposición se impuso esta semana al lograr la exención del pago de ABL para jubilados con hasta 2,5 haberes mínimos. Lo hizo con votos de PJ, UCR y aliados de Larreta.
El oficialismo acompañó cuando ya era tarde. La maniobra disimuló una interna: ¿se rebelaron Nieto y Matías López ante el destrato de Uspallata?
El Consejo Económico y Social quedó en la mira. El Ejecutivo lo usó como excusa para explicar la medida. Pero en la práctica, es una caja de contratos con sello político. Ya tomaron nota arriba.
Angelici ahora va por la presidencia de la Legislatura. Quiere imponer a Lautaro García Batallán, que estaba octavo en la boleta. Para eso necesita que bajen dos legisladores ya electos. No será fácil.
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Darío Nieto no piensa dejar su banca. Waldo Wolff, sexto en la lista, tampoco. “Tengo un compromiso constitucional”, repite. Ni por un sillón ni por promesas.
El Tano quiere poder sin ruido. Pero la interna PRO no se lo va a regalar. En la Ciudad, el ajedrez se juega con codazos, veladas en Libertador y movimientos de piezas a plena luz.
















