

Ignacio Torres fue el anfitrión de un encuentro que reunió a cinco mandatarios provinciales en plena Capital Federal. Desde la Casa de Chubut, anunciaron la creación de un frente electoral común con sello federal.


“Es un grito federal que necesita voces en el Congreso”, declaró Torres tras el encuentro. Lo acompañaron Maximiliano Pullaro (Santa Fe), Martín Llaryora (Córdoba), Carlos Sadir (Jujuy) y Claudio Vidal (Santa Cruz). La alianza se confirmó con una firma conjunta y una consigna: más presencia política del interior.
El objetivo es claro: competir en octubre y plantar bandera propia. Los gobernadores quieren llevar candidatos al Congreso con una plataforma que combine equilibrio fiscal, obra pública e impulso a las economías regionales.
En su mensaje, Torres reclamó que “el esfuerzo de los argentinos es innegociable” y pidió que los ajustes no caigan sólo sobre las provincias. “Las obras de infraestructura son el único camino para desarrollar nuestras provincias”, afirmó el mandatario chubutense.
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El documento difundido bajo el título “Un grito federal” apela a un tono directo, sin ambigüedades. Reivindica el trabajo, la producción, el orden de las cuentas y la necesidad de construir una Argentina “sin grietas ni violencia”.
“Nuestra vocación es clara: construir todos los días la Argentina de los sueños de todos”, cierra el texto que ya empezó a circular por redes sociales y grupos de WhatsApp entre intendentes y legisladores del interior.
La movida sacude el mapa político. No es habitual que mandatarios de partidos distintos —UCR, PJ, PRO y sellos provinciales— confluyan en un armado común. La foto fue política, pero también táctica: marcar un límite ante las tensiones con Nación.
Las provincias vienen perdiendo peso político. El recorte de fondos, la paralización de obras y la falta de interlocución con la Casa Rosada encendieron las alertas en Córdoba, Santa Fe, Jujuy y Santa Cruz. Torres fue el primero en decirlo en voz alta.
Pullaro y Llaryora aportan peso territorial. Ambos gobiernan distritos grandes y con fuerte identidad productiva. Vidal y Sadir representan zonas estratégicas en el sur y el norte del país. El frente nace con respaldo federal y vocación legislativa.
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La novedad es que ya no quieren ser sólo “dialoguistas”. El documento lo dice entre líneas: acompañar la gobernabilidad no implica ceder en silencio. Quieren discutir el rumbo económico, el reparto de recursos y el futuro del federalismo.
Nadie habló aún de candidaturas. Pero el calendario corre y octubre está a la vuelta de la esquina. El armado ya empezó a buscar nombres para encabezar las listas en cada provincia. Buscan perfiles con gestión, arraigo y discurso propio.
El frente también busca evitar el desgaste de sumarse a estructuras nacionales con internas ajenas. “Queremos vocerías que defiendan a la Argentina del trabajo”, repitieron varios gobernadores en off. La frase no apunta sólo a Milei, sino también a los partidos tradicionales.
El interior quiere dejar de mendigar fondos y empezar a fijar agenda. La señal está dada: hay un nuevo actor en la mesa nacional, con gobernadores que ya no quieren ser espectadores. El Congreso es la próxima parada.

















