
Detectaron litio en rocas del centro de Río Negro y apuntan a una futura explotación
Actualidad08/08/2025
Sergio Bustos
En las entrañas de la meseta rionegrina apareció una promesa mineral. El Servicio Geológico Minero Argentino (Segemar) detectó estructuras rocosas con indicios de litio en la zona de Yaminué, ubicada entre Ramos Mexía y Valcheta.


“Estamos ante un hallazgo importante”, afirmó el geólogo Claudio García. El especialista explicó que las rocas analizadas son pegmatitas, formaciones ígneas poco exploradas en el país, pero con capacidad para alojar litio en minerales como espodumeno o lepidolita.
Durante diez días, el equipo del Segemar recorrió dos bloques geológicos en el norte y sur de Yaminué. Recolectaron 28 muestras para análisis químicos y 60 para estudios con lupa binocular, además de otras específicas para datar las rocas.
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“La zona tiene cuerpos tabulares de hasta 1,5 metros de espesor y 200 de largo, con zonación interna compleja. Estas características son prometedoras”, agregó García. También se encontraron estructuras hidrotermales con cuarzo, fluorita y sulfuros.
El informe ya fue entregado a la Secretaría de Minería de Río Negro, que destacó el avance del proyecto. Ahora las muestras se analizan en laboratorios para determinar su composición y presencia de litio.
El estudio se enmarca en un acuerdo firmado con Segemar durante la feria Arminera. Allí se definieron dos áreas de interés: “Área Centro”, entre Ramos Mexía y Valcheta, y “Área Occidental”, al sur del río Limay.
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A diferencia del litio de salares, en Río Negro se explora litio en roca. Este método exige procesos distintos, similares a la minería aurífera, pero sin cianuro. Podría utilizarse ácido sulfúrico para separar el mineral.
Mientras tanto, la empresa australiana Lion Critical Elements ya explora otra zona en Mamuel Choique, también sobre roca. Su desembarco se dio tras la salida de una firma canadiense, que inició el permiso provincial.
El litio es un mineral estratégico. Abastece baterías para autos eléctricos, celulares, paneles solares y notebooks. El mundo mira hacia el sur argentino y Río Negro se suma al mapa.
Por ahora, los datos son preliminares, pero el subsuelo rionegrino podría esconder un nuevo recurso de valor global.
















