
Policías y agente sanitario recorren 35 kilómetros a caballo para asistir a familias cordilleranas
Actualidad08/08/2025
REDACCIÓN
En una misión que combinó esfuerzo físico y compromiso comunitario, personal policial del destacamento de Manzano Amargo y un agente sanitario recorrieron 35 kilómetros a caballo para asistir a familias de la cordillera neuquina. El objetivo fue llevar atención médica, medicamentos y contención a vecinos que viven en zonas de difícil acceso.



La travesía partió a las 8:30 de la mañana del jueves, con temperaturas bajas y un cielo cubierto que anticipaba una jornada exigente. El Oficial Inspector Méndez Daniel, el Sargento Ayudante González Mariano y el Agente Sanitario Lihue Sprumont emprendieron el recorrido hacia los parajes Piche Ñire, Vega Tres Teros, El Huemul y Costa Varvarco, en el norte provincial.
OTRAS NOTICIAS:
Durante once horas, el grupo atravesó caminos cordilleranos en pleno invierno, sorteando pendientes, barro y tramos congelados, hasta llegar a los primeros hogares. En El Huemul fueron recibidos por Juan Pablo Morales, de 75 años, y su hija Hilda Mariela, de 40. Allí comenzaron la primera ronda de controles médicos.
Más tarde, visitaron a Atiliano Vázquez y María Antonia Yáñez, ambos de 61 años, y luego a José del Tránsito Retamal, de 74, junto a su vecino César Francisco Morales, de 60. En cada lugar se realizaron mediciones de presión arterial, control de glucemia y entrega de medicación específica según cada necesidad.
OTRAS NOTICIAS:
El sistema ANDES permitió registrar los datos médicos en tiempo real y garantizar seguimiento, aun en parajes donde el hospital más cercano está a horas de distancia. Esto posibilitó que los pacientes quedaran integrados a un circuito de control sanitario sin necesidad de desplazarse.

Si bien la tarea tuvo un fin sanitario, el valor humano fue central para quienes recibieron la visita. Según relataron los protagonistas, “saber que su salud importa y que su historia sigue viva en esta tierra es lo que más nos llevamos”. El encuentro fue también una oportunidad para escuchar sus inquietudes y compartir momentos en medio de la soledad invernal.
OTRAS NOTICIAS:
El regreso comenzó al caer la tarde, con un equipo exhausto pero con la satisfacción de haber cumplido con la misión. La jornada terminó a las 19:30, luego de atravesar nuevamente los caminos cordilleranos ya oscurecidos.

Para los pobladores, la llegada de asistencia no solo implica una mejora en su salud, sino también la certeza de que no están olvidados. En cada saludo y agradecimiento, los visitantes percibieron que la presencia física tiene un valor difícil de reemplazar en contextos de aislamiento.

















